Lewandowski abre el camino de la victoria en un clásico que termina con goleada del Barcelona al Real Madrid (0-4)
El árbitro anuló un gol de Mbappé por fuera de juego en la primera parte. Un gol de Lamine Yamal y otro de Raphinha sentencian el encuentro en el Santiago Bernabéu.
El Barcelona se ha impuesto en el primer Clásico de la temporada frente al Real Madrid con dos goles de Lewandowski, uno de Lamine Yamal y otro de Raphinha en la segunda parte que han sentenciado el 0-4 en el estadio Santiago Bernabéu.
Kylian Mbappé se quedó a las puertas de abrir el marcador en la primera parte del clásico entre cuando en el minuto 30 superó a Iñaki Peña picando el balón ante su salida, pero partió en fuera de juego en su arrancada y el marcador se mantuvo al descanso con el 0-0 inicial.
Fue el sexto fuera de juego de Mbappé en los primeros 45 minutos -ocho en total del conjunto blanco-, intentando aprovechar la defensa adelantada que propuso un Barça que no llegó con peligro a la portería de Lunin más allá de un disparo lejano de Pedri.
Tras una primera media hora trepidante, el partido bajó un tanto su ritmo y el Real Madrid no consiguió asomarse con mucho más peligro sobre la portería visitante. El Barça controló algo más, pero solo tuvo dos opciones con un pie salvador de Militao en un 'pase de la muerte' tras un flojo rechace de Lunin y un cabezazo de Íñigo Martínez por encima del larguero tras un saque de esquina.
Al descanso, pese a los presagios, no hubo goles, pero todo iba a cambiar tras el paso por vestuarios. Flick metió a Frenkie de Jong por Fermín López para acercar más a Pedri a la mediapunta, pero no fue el canario el que apareció sino Casadó, que dejó solo a Lewandowski ante Lunin para hacer el 0-1.
El delantero polaco, que nunca había marcado en Liga al Real Madrid y sólo una vez en toda su carrera en el Santiago Bernabéu, demostró poco después su sensacional estado de forma para culminar apenas dos minutos después una gran jugada colectiva y un preciso centro de Raphinha y poner el Clásico muy cerca.
El conjunto madridista, otra vez recibiendo dos 'mazazos' en poco tiempo, se tambaleó y se vio obligado a dar un paso adelante. Luka Modric fue la primera solución de Ancelotti y su equipo pudo meterse en el choque, pero Mbappé, tras un gran pase de Vinícius, perdonó un claro mano a mano ante un Iñaki Peña, luego también rápido para salir a un peligroso balón al espacio. Flick metió a Dani Olmo para aprovechar mejor los espacios que dejaba el campeón, al que perdonó su 'verdugo'.
Lewandowski desaprovechó dos muy claras para haber enviado a la lona a su rival, ya muy expuesto y poco fino en la buenas opciones de Bellingham y una más de Mbappé, errático en su definición y donde más letal es. Ancelotti metió a Brahim, pero no le dio tiempo a tener impacto porque el líder, voraz, no aflojó y no perdonó las concesiones para golear con Yamal y una 'delicatessen' de Raphinha.