Fiesta, fútbol y una promesa olímpica: la selección disfruta su Nations League en 'casa' de Jenni Hermoso
La plaza de toros de Vistalegre, en el distrito madrileño de Carabanchel, ha acogido el reencuentro de la selección femenina con la afición.
Esta vez la celebración no ha tenido nada que la opacase. Sólo fiesta, fútbol... y una promesa 'olímpica' que ha abrochado la gran tarde de la selección femenina para compartir su segundo título, la recién conquistada Nations League, con la afición este jueves por la tarde en Madrid.
El Palacio Vistalegre de la capital, situado en el distrito de Carabanchel, la 'casa' de Jenni Hermoso, recibió a unas jugadoras que siguen haciendo historia. Desde las 17:00 empezó la fiesta previa, con actuaciones musicales de Delaporte, Marlena, Elena Farga y DJ Michenlo, así como numerosos vídeos recordando los goles clave de 'La Roja'.
El plato principal llegó a las 19:00, con la irrupción de las jugadoras. La primera en saltar fue la seleccionadora Tomé y, después, de una en una salieron al escenario todas las internacionales, menos Laia Aleixandri y Lucía García, quienes tuvieron que emprender antes la vuelta a sus clubes. La traca final de la presentación fue la entrada de las capitanas Irene Paredes, Alexia Putellas, Jenni Hermoso y Olga Carmona, con el trofeo de campeonas.
Hermoso fue quien entró con el trofeo y quien lo puso en el centro del escenario. La madrileña fue la más aclamada, en gran parte por estar en casa y, también, por la batalla personal y social que inició su pleito con el expresidente de la RFEF Luis Rubiales, por el beso en la celebración del Mundial.
Un punto de inflexión para unas jugadoras que levantaron la voz reclamando igualdad dentro del fútbol español, como ejemplo para el resto de la sociedad. La propia Tomé, en su discurso, se animó con el 'Jenni, Jenni' que coreó en varias ocasiones el público de Vistalegre. "Es un placer estar aquí con este título que han conseguido estas grandísimas futbolistas que tenemos en España", dijo la seleccionadora nacional, como recoge Europa Press.
"Es un día para sentirnos felices", añadió, dando gracias a su cuerpo técnico y, en especial, a las jugadores, interrumpida también con el 'campeonas, campeonas' y lanzando el mensaje que viene sonando desde el pitido final contra Francia. "Vamos a por los Juegos Olímpicos", apuntó Tomé.
Además, la capitana Paredes también cogió el micrófono para agradecer el apoyo de la afición. "Es importante sentir vuestro apoyo, vamos a por más. Os necesitamos", afirmó, satisfecha del trabajo de un equipo que, además de ganar la primera edición de la Liga de Naciones, logró el primer billete olímpico en la historia del fútbol femenino español.
Después, al escenario volvió la música pero esta vez con la participación de las internacionales españolas, con algunas de las canciones que suenan en el autobús de España. Marlena interpretó su 'Bailamorena', con Jenni a los coros, y la guinda fue con Elena Farga, la intérprete del himno de la selección en el Mundial de Australia y Nueva Zelanda.
El final de fiesta fue el clásico 'We Are the Champions' de Queen, breve pero intenso, con alguna jugadora ya pendiente de tener que regresar al trabajo con sus clubes. La foto de familia y la enésima ovación de los presentes cerró una nueva fiesta de un equipo hecho para hacer historia y que mira ahora a París 2024.