Juan Marín: "Con Podemos no voy ni a coger billetes de 500 euros"
Entrevista con el candidato de Ciudadanos en las elecciones andaluzas: “El PP y el PSOE son más de lo mismo para conservar chiringuitos”.
Hace tres años y medio, Ciudadanos irrumpió casi por sorpresa en el Parlamento andaluz con nueve diputados. Y un sereno y desconocido político, Juan Marín, saltaba a la arena del Hospital de las Cinco Llagas -sede de la Cámara autonómica- para convertirse en la llave de la política regional y pactar con Susana Díaz su investidura tras tres intentos fallidos.
La cosa ha cambiado mucho: hoy Ciudadanos se coloca segundo en las encuestas en Andalucía superando al PP y no ve imposible lograr lo que no ha hecho nadie, arrebatarle al PSOE la sacrosanta Junta de Andalucía tras 37 años de gobierno ininterrumpido. Marín (Sanlúcar de Barrameda, 1962), que fue entrenador de voleibol, sabe que el 2 de diciembre juega el partido más importante de su vida. Y no le gusta perder.
¿Cómo van estos días primeros de precampaña?
Muy bien, hay un buen trabajo de organización autonómico bien hecho desde hace algún tiempo. Trabajando con muchas ganas, todo el mundo volcado y con un ejército de gente a nuestro lado. Hace tres años y medio éramos muy poquitos, hoy somos más de 30.000.
Las elecciones se han precipitado después de que Cs diera por roto el pacto con el PSOE hace unas semanas. Los otros partidos dicen que esto es un teatro de los dos partidos porque interesaban ahora los comicios. ¿Es así?
Lo que ha sido un teatro ha sido el Parlamento andaluz en estos últimos 37 años, con un PSOE acomodado y un PP conformista y resignado. La señora Díaz ha adelantado unas elecciones pero no mucho más de lo que la inmensa mayoría de los grupos y de la opinión pública pensaba. Estaba buscando un motivo y lo ha hecho para huir de un calendario y un invierno judicial que se le avecina muy frío y largo. Y también huyendo de que hubiera una posible coincidencia con unas generales con su compañero Pedro Sánchez. En cualquier caso, ahora solo ha convocado las elecciones, pero la legislatura acabó en el momento en el que decidió incumplir con los acuerdos con Cs.
La última encuesta del Egopa -el CIS andaluz.- fue en febrero. Cs aparecía en segunda posición tras el PSOE. ¿Confía en el sorpasso al PP? ¿Qué dicen sus sondeos internos?
Confiamos en nuestro trabajo, respeto mucho los sondeos pero son estados de opinión en un momento determinado. Es verdad que en todos la tendencia es de crecimiento, pero sobre todo nos reconocen una utilidad en la gestión pública, somos un partido limpio que no está salpicado por la corrupción, como está el bipartidismo andaluz. Hemos sido capaces de hacer algunas cosas que otros en 37 años no habían logrado: bajar impuestos, eliminar el de sucesiones, arrancar de sus escaños a Chaves y Griñán... El principal escollo los hemos encontrado con el PP y el PSOE en las medidas de regeneración democrática. Saco la conclusión de que son más de lo mismo cuando se trata de conservar estructuras y chiringuitos.
El PP les ha pedido un compromiso previo de que no van a apoyar después del 2-D a Susana Díaz, incluso les han retado para ir al notario a firmarlo...
Lo he escuchado, pero me parecía una broma del señor Pablo Casado. No entiendo en qué mundo vive este hombre. Estamos en el siglo XXI, tenemos que hacer política y aspiro a ganar las elecciones, no a firmar ningún pacto con nadie y que haya un cambio de Gobierno cuando llegue el día 2. Ya he comprobado cómo firmando con el PP y el PSOE luego incumplen. Cuando llegue el 2-D, tendremos que hablar probablemente de lo que haya decidido la voluntad de los andaluces y ya veremos si se puede o no conformar un Ejecutivo. Esto es más importante y serio.
Lo que está claro es que la época de las mayorías absolutas pastó y después del 2-D empezará el partido de los pactos. ¿Con quién están hoy más cerca de pactar? ¿Con el PSOE o el PP?
En ese sentido, me gustaría dejar meridianamente claro que en mi pantalla no están los pactos, solo y exclusivamente en trabajar para ganar. A partir de ahí, hay un espacio político que podemos compartir con algunas fuerzas y con otras no. Por supuesto, con Podemos somos antagónicos, estamos en una posición completamente distinta. Ni puedo ni me voy a sentar con los que quieren romper mi país, hemos comprobado después de cuatro años cuál es la forma de pensar y actuar en el Parlamento de Andalucía. En la pasada comisión de investigación se fueron a la feria en vez de pensar qué ha pasado con el dinero de los parados andaluces. Estamos en polos opuestos, desde el respeto. A partir de ahí, si la aritmética da, espero que PP y PSOE apoyen a un presidente de Cs.
¿Y aceptaría un pacto si dieran las cuentas entre PP, Cs y Podemos para desbancar al PSOE después de los 38 años de gobierno?
Se lo voy a decir muy claro: yo con Podemos no voy ni a coger billetes de 500 euros. Si el PP o el PSOE quieren pactar con Podemos, que lo hagan, pero Cs no va a estar en esa ecuación.
¿Y ser vicepresidente de Susana Díaz?
De verdad, esto no va de sillones. Si hubiera querido serlo, a lo mejor lo podíamos haber negociado en 2015. No es una aspiración personal de Juan Marín. Juanma Moreno quiere ser presidente porque Cs lo haga. Yo quiero que me hagan presidente los andaluces, ni Moreno ni Teresa Rodríguez. Hasta ahora la historia está ahí, son cuarenta años del PSOE cargados de corruptelas. Estamos viendo ahora en el caso de Faffe cómo se utilizaron tarjetas de crédito en prostíbulos, también el caso de los ERE... Y el PP tiene la Gürtel, Púnica. Además, aquí en Andalucía el Partido Popular ha estado de espectador de lo que sucedía, tiene la vitrina cargada de premios de consolación. Ha llegado el momento de hacer otra política.
¿Qué ofrece Ciudadanos a los andaluces?
Estamos decididos a evaluar la gestión que se ha hecho hasta ahora, poner en marcha medidas que apoyen al sector empresarial y a los emprendedores, bajar la presión fiscal, aprovechar el aumento de recaudación para tener unos mejores servicios sociales, de Sanidad y de Educación dándole a los profesionales el protagonismo que tienen que tener. Tenemos unos funcionarios modélicos, pero que no se ven acompañados por la clase política y se les castiga por no tener el carné del PSOE. Yo no quiero ser aforado, ¿por qué tengo que tener más privilegios que mi mujer? Me gustaría hacer política con mayúsculas, cualquier acuerdo tiene que ser hablando de proyectos de futuro para esta tierra.
En estas primeras horas de precampaña, Díaz dice sobre Cs que responden a los intereses de Madrid y de Albert Rivera, que no tienen autonomía de partido y que la campaña la dirigen desde la calle Alcalá.
Entiendo la envidia que siente Díaz cuando hablamos de Rivera o Inés Arrimadas. Ya le gustaría tener unos compañeros así, estoy tremendamente orgulloso del trabajo que se está haciendo a nivel nacional. Cs es un solo proyecto para este país. A Díaz le preocupa mucho que venga Pedro Sánchez a Andalucía en campaña porque le resta. Cada vez que el presidente decide algo le está dando un portazo a Díaz, lo digo por la financiación autonómica o los aforamientos. Es una prueba evidente de la confrontación que hay desde las primarias del PSOE, cuando ella perdió por primera vez unas elecciones. Intenta atacarme o insultarme, pero para mí es un orgullo que vengan Albert, Begoña o Ignacio. Estamos abriendo la puerta al talento.
El pasado domingo se vio en Madrid un acto de Vox llenando el Palacio de Vistalegre. ¿Cree que ese fenómeno puede aparecer en Andalucía en estas elecciones?
No lo sé sinceramente, no tengo datos. Hay que respetar todas las opciones políticas y todo el mundo tiene derecho a poder plantear cuáles son sus propuestas para los ciudadanos.
Si llegara al Palacio de San Telmo, ¿cuál sería la primera media que tomaría?
Poner en marcha una evaluación y medir exactamente en qué momento se encuentra la Administración de la Junta para tomar decisiones de forma inmediata, en temas de empleo y riqueza. Pondríamos en marcha tantísimas cosas que en un periodo corto de tiempo se vería la acción de Gobierno de Cs en la Junta.
¿Se arrepiente de haber apoyado la investidura de Díaz hace tres años?
No puedo arrepentirme por una razón muy sencilla: nos han cogido estos cuatro años trabajando y hemos conseguido eliminar impuestos injustos, por primera vez en 40 años hemos logrado bajar a la clase trabajadora el impuesto de renta de personas físicas, hemos conseguido medidas y recursos suficientes para tener el mayor presupuesto de la historia sanitaria de Andalucía, meter 129 millones de euros cada año para los autónomos... ¿Cómo me voy a arrepentir de estas cosas?
¿Se siente defraudado por Díaz?
Pues claro que sí. Ha defraudado a los andaluces porque firmó un documento de compromisos que es público, dio su palabra. A partir de ahora cada uno tendrá que dar sus explicaciones.
¿Está más débil políticamente la presidenta después de la debacle de las primarias?
Desde entonces no ha conseguido cerrar esa herida, está abierta todavía. Es evidente cada vez que se habla con ella o se debate. Yo estoy más acostumbrado porque vengo del ámbito deportivo, a veces se gana y otras se pierde, hay que intentar jugar bien el partido, ser honesto. Oye, cuando el contrario gana hay que felicitarlo. Ella después de tantos años en política nunca se había enfrentado a una derrota.
Andalucía sigue teniendo las cifras de desempleo más altas, una renta per cápíta de las más bajas de España... ¿Qué pasa? ¿Es un problema de los políticos? ¿De la industria, de la sociedad, falta de inversiones?
Los andaluces están muy por encima de su Administración. La Junta tiene una deuda enorme con los andaluces porque no han tenido ningún rival político durante estos años y les ha ido bien. Han tejido una red donde nos han hecho creer Díaz y sus antecesores Chaves y Griñán que esto lo llevamos en el ADN. No, mire usted, los ciudadanos andaluces no llevamos en el ADN ser los últimos en las listas del paro ni tener el mayor índice de fracaso escolar ni el índice de pobreza. Eso ha estado en el ADN de la Junta y de los que la han gobernado. Los andaluces somos mucho más de los que no quiere hacer creer el PSOE. Lo comprobamos cada día: invito a cualquiera a que vaya un día a un invernadero en Almería o a una almazara a Jaén, verán cómo las inversiones, la investigación, el desarrollo y la creatividad que hoy hace que seamos competitivos a nivel mundial sin ayuda de la Administración.