Tusk no quiere "muros" entre Londres y la UE, pero solo ofrece un acuerdo comercial tras el Brexit
El presidente del Consejo Europeo afirma que "esto no puede sorprender a nadie".
El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, ha avisado este miércoles de que solo cabe negociar con Reino Unido un mero acuerdo de libre comercio teniendo en cuenta las líneas rojas de Reino Unido de salirse del mercado interior, la unión aduanera y no estar sujeto a la jurisprudencia del Tribunal de Justicia de la UE (TUE) y ha avisado de que el bloque preservará la integridad de su mercado interior y no habrá acceso "exclusivo" en función de sectores.
"Reino Unido abandonará el mercado interior, la unión aduanera y la jurisdicción del TUE. Por tanto, el único modelo posible que queda es un acuerdo de libre comercio. Esto no puede sorprender a nadie", ha explicado Tusk, en rueda de prensa en Luxemburgo para presentar su propuesta de directrices para negociar la futura relación con Reino Unido, que ha confiado en que aprueben los líderes europeos en su cumbre del 22 y 23 de marzo.
DERECHOS Y DEBERES, SIN PICOTEAR
Tusk ha dejado claro a Londres de que "no hay posibilidad de tener ningún tipo de forma exclusiva de mercado interior para algunos sectores de la economía" y ha insistido en "el equilibrio entre derechos y obligaciones". "La UE no puede aceptar acordar los derechos de Noruega con las obligaciones de Canadá", ha avisado, insistiendo en el interés europeo de preservar la integridad del mercado interior.
"Un enfoque mixto y de picoteo para un no Estado miembro está fuera de toda cuestión. No vamos a sacrificado estos principios simplemente no está en nuestro interés", ha avisado, insistiendo en que "ningún Estado miembro es libre para escoger sólo aquellos sectores del mercado interior que le gusta, ni aceptar el papel del TUE únicamente cuando está en su interés".
COMERCIO SIN ARANCELES Y SERVICIOS
Tusk ha propuesto negociar un acuerdo de libre comercio "ambicioso y avanzado", como se ha hecho con Canadá, que cubra "todos los sectores y con cero aranceles para los bienes" ni topes de contingentes y normas de origen apropiadas. Y debe incluir el acceso recíproco a aguas y recursos de pesca.
"Pero sólo será un acuerdo comercial", ha avisado Tusk. "Nuestro acuerdo no hará que el comercio entre Reino Unido y la UE sea sin fricciones o más tranquilo. Lo hará más complicado y costoso de lo que es hoy. Para todos. Esto es la esencial del Brexit", ha remachado.
El borrador de directrices, al que ha tenido acceso Europa Press, deja claro que el acuerdo de libre comercio "no puede ofrecer los mismos beneficios que la adhesión y no puede equivaler a la participación del mercado interior o partes del mismo" y que las cuatro libertades del mercado interior -libre circulación de bienes, servicios, capitales y personas- "son indivisibles y no puede haber picoteo a través de la participación basada en un enfoque por sector". También que serán necesarios los controles aduaneros en la frontera para controlar la entrada de productos.
El presidente del Consejo Europeo ha admitido que el acuerdo debe incluir también los servicios, aunque el texto evita mencionar expresamente los servicios financieros, que son prioritarios para Londres.
"No queríamos mencionar ningún área de servicios. Quizá lo pondremos a lo largo de las negociaciones y no lo excluyo", ha explicado un alto funcionario europeo, que ha admitido que "el principal instrumento" para incluir los servicios financieros eventualmente es un sistema de "equivalencia" normativa. "Pero no centro del mercado interior", ha remachado.
También plantea cubrir el acceso a los mercados de la contratación pública, inversiones y protección de la propiedad intelectual, incluidas las indicaciones geográficas.
GARANTÍAS CONTRA LA COMPETENCIA INJUSTA
El texto también exige "garantías" de que habrá "un marco equitativo" con el objetivo de impedir "la competencia injusta" si Reino Unido por ejemplo reduce impuestos, las normas sobre ayudas de estado o los estándares sociales y ambientales y un mecanismo de supervisión y para resolver disputas, incluido la posibilidad de sanciones. La UE sigue reivindicando su autonomía judicial y el papel del Tribunal de Justicia de la UE.
El acuerdo ofrecido "quizá sea menor" a lo que aspira Reino Unido, pero el bloque está dispuesto a revisar su oferta si Londres da marcha atrás en sus líneas rojas de salirse del mercado interior, la unión aduanera y la jurisprudencia de la justicia europea.
"Mi propuesta demuestra que no queremos construir un muro entre la UE y Reino Unido", ha asegurado Tusk, que ha defendido el interés en que ambas partes sigan siendo socios "lo más cercano como sea posible" y ha asegurado que el bloque negociará "con mente abierta, positiva y constructiva, pero también con realismo".
Tusk ha propuesto asimismo mantener "una cooperación estrecha" con Reino Unido una vez salga del bloque en materia de seguridad y cooperación judicial, que Reino Unido pueda seguir participando en los programas de la UE de investigación e innovación y educación y cultura y comenzar a negociar "lo antes posible" un acuerdo para evitar la ruptura en los vuelos entre la UE y Reino Unido.