¿Dónde están las artistas? Busca el punto rojo
Yolanda Domínguez reivindica en ARCO la presencia femenina en el arte y recuerda que las mujeres #estamosaquí.
"¿Me estás viendo? Pensaba que al ser mujer y artista no se me ve".
La frase la repetía este miércoles por la mañana la artista visual Yolanda Domínguez en la inauguración de la feria ARCOmadrid 2018. Pero también la podría haber dicho cualquiera de las 60 artistas que, como ella, se pasearon por la jornada inaugural de la feria de arte contemporáneo con un localizador rojo como el de Google Maps sobre la cabeza.
Bajo el lema #estamosaquí invadieron el recinto madrileño para denunciar la falta de presencia femenina en el arte. "Es un movimiento de artistas que quiere reivindicar la visibilidad de las mujeres en el ámbito de la cultura. Pasamos desapercibidas en exposiciones, en premios, en concursos, en becas, en puestos de poder dentro del circuito artístico... Se nos ha ocurrido ponernos este símbolo de geolocalización para ver si de una vez se nos ve", explicaba Domínguez a El HuffPost durante la intervención.
Los datos respaldan sus palabras. Basta un ejemplo: en la feria de 2017 sólo un 25% de los artistas que expusieron eran mujeres, según datos recogidos por la asociación Mujeres en las Artes Visuales (MAV). Si nos ceñimos a la presencia de artistas españolas, el porcentaje se reduce hasta un indignante 5%.
A su lado, la también artista María Gimeno intentaba darle una explicación a esta escasa presencia, mientras las otras participantes seguían con su localizador rojo recordando que #estamosaquí. "Siempre ha habido una invisibilización generalizada. Es una inercia que se arrastra de hace tiempo, básicamente porque nunca estamos en las instituciones. Si no tienes ningún tipo de reconocimiento es muy difícil que el mercado del arte te reconozca. Y ARCO no olvidemos que está dentro del mercado del arte", repetía.
Domínguez y Gimeno usaron las redes sociales para buscar artistas que se unieran a su acción. Después de un primer llamamiento por Twitter, el boca a boca hizo el resto. Y este miércoles su acción terminó de completarse gracias al hashtag #estamosaquíde Instagram: artistas y estudiantes de arte que se quedaron fuera se sumaron a la acción compartiendo fotos en redes sociales.
En ARCO se unieron por ejemplo Mima Kahlo, quien integra la tecnología al textil y quien tiene claro que la presencia femenina en el arte es necesaria. O la pionera Marisa González, de la junta de MAV. "Estuve exponiendo en el primer ARCO, y en el segundo y en el tercero, en la primera exposición del Reina Sofía... Y ahora sin embargo estoy con la gotita roja, a pesar de seguir trabajando muchísimo", contaba.
"Todos los años hacemos un estudio de ARCO y la situación no mejora nada, un 4% o un 5% de mujeres españolas. En las extranjeras la situación mejora un poco, pero en las artistas nacionales no. Y en los museos la situación es igual", recuerda esta artista de Bilbao, cuya obra forma parte de la colección del Museo Reina Sofía de Madrid pero no está expuesta en sus salas. "Esto es a la inversa que el chovinismo. Se potencian los extranjeros, algunas mujeres extranjeras...", pero no producto nacional.
En su jersey luce una chapa de La Caja de Pandora, el movimiento español contra los abusos sexuales en el arte nacido a principios de año, que también quiere reivindicar la presencia femenina en el arte. "Cuando no hay dinero exponen las mujeres, cuando hay dinero exponen los hombres", continúa esta activista y artista que achaca esta escasa presencia al cambio del mercado del arte respecto a los 80.
Seguida por las cámaras y los micrófonos de los medios que acudieron al primer día de ARCO, Domínguez se muestra satisfecha con la repercusión. "El éxito es que es un mensaje positivo. No solamente denunciamos que no estamos, sino que nos personificamos, estamos aquí. Y además estamos en colectivo, haciendo fuerza. No es una acción individual. Cada vez se nos ve más en todos los ámbitos, no solo en la cultura, que levantamos la mano y decimos estamos aquí", añade Domínguez.