Las cicatrices del PSOE se tensan en Bruselas
Elena Valenciano cobra fuerza como futura jefa de los socialistas europeos en la Eurocámara pero no cuenta con el apoyo de Pedro Sánchez.
Las heridas de la lucha interna por el control del PSOE podrían abrirse de nuevo. El nombre de Elena Valenciano, ex vicesecretaria general, cobra fuerza entre los posibles sustitutos de Gianni Pitella, lo que permitiría al PSOE recuperar la influencia que una vez tuvo en la Eurocámara.
No cuenta, de momento, con el apoyo de Pedro Sánchez. Valenciano apoyó en las primarias a Susana Díaz y jugó un papel importante en el giro a la abstención del PSOE. El puesto supondría una importante altavoz para el PSOE en Europa.
Gianni Pittella, actual jefe de los socialistas europeos en la Eurocámara, dejará su puesto cuando sea elegido senador en las elecciones italianas del 4 de marzo. Los movimientos para sucederle ya han comenzado en Bruselas. La silla que deja Pittella tendrá un papel fundamental en el tramo final de legislatura, cuando los socialistas deben perfilar su estrategia para las elecciones europeas (mayo 2019) y elegir su candidato para presidir la Comisión Europea.
El favorito para suceder a Pittella es Udo Bullmann, vicepresidente del grupo parlamentario, sindicalista alemán y con amplia trayectoria en la Eurocámara, pero su candidatura genera cada vez más rechazo entre sus colegas. Hay recelo frente al excesivo poder alemán. "Si Bullmann fuera el líder del grupo, los debates de líderes en la Eurocámara serían en alemán", resume una fuente del Grupo Socialista. Los grupos parlamentarios de populares, verdes y la izquierda están liderados por alemanes. Pesa también sobre Bullmann la gran coalición en Alemania, a punto de ser ratificada por los militantes del SPD, que viven estos días una grave crisis.
El nombre de Valenciano suena con creciente entusiasmo entre sus colegas. Es ampliamente conocida porque actualmente es vicepresidenta del Grupo y tiene larga experiencia en el Parlamento (fue eurodiputada también entre 1999 y 2008). Su continúa defensa de los derechos de los refugiados en los últimos dos años le ha generado simpatías entre sus colegas, en especial en el ala izquierda del Grupo.
Un europarlamentario del PSOE asegura bajo condición de hacerlo de forma anónima que tendrían posibilidades de ganar la elección: "Somos una delegación de 14 eurodiputados, no somos la más grande, pero si actuamos unidos podemos tomar ventaja de la actual división de italianos y alemanes".
Otro europarlamentario del PSOE apunta: "Elena tiene tirón, es del sur de Europa, la antítesis de la gran coalición y, además, es mujer. No sobran precisamente mujeres en los puestos clave europeos".
Desde el entorno de Elena Valenciano tratan de poner cautela al tirón que genera su candidatura. "Es pronto. Pittella es todavía presidente del grupo y Elena sólo se presentará para sucederle si cuenta con el respaldo de Pedro Sánchez". Desde la calle Ferraz guardan silencio ante las preguntas de El HuffPost sobre la posible candidatura de Valenciano.
No parece que a Sánchez le entusiasme la idea de apoyar a Valenciano para ocupar uno de los puestos más influyentes de la familia socialdemócrata europea. En la reunión de la delegación del PSOE en la Eurocámara, celebrada la semana pasada, se trató el tema.
La gran mayoría de los 14 europarlamentarios mostró su apoyo a Valenciano para suceder a Pittella, pero la jefa de la delegación, Iratxe García, frenó el entusiasmo. Fuentes conocedoras del encuentro aseguran que García - muy próxima a Sánchez -sugirió que el líder del PSOE debía antes conversar con otros líderes europeos para calibrar cual era la candidatura más conveniente.
Los desencuentros entre Pedro Sánchez y Elena Valenciano no son nuevos. Tras el fiasco de las europeas de 2014 para el PSOE (pasaron de 23 a 14 escaños), la dimisión de Rubalcaba precipitó la dimisión de Valenciano como jefa de la Delegación del PSOE en la Eurocámara. Su candidatura en el número 1 de la lista había sido una apuesta personal del exsecretario general. Al llegar a la secretaria general del PSOE, Sánchez situó a Iratxe García al frente de los socialistas españoles en el Parlamento Europeo y Valenciano pasó a un segundo plano.
La crisis abierta en el PSOE a raíz de la salida de Pedro Sánchez en octubre de 2016 alteró el equilibrio de poder de los socialistas españoles en Bruselas. Ramón Jáuregui sustituyó a Iratxe García como jefe de la delegación y Elena Valenciano fue elegida vicepresidenta del Grupo Socialista, siendo la segunda más votada, por detrás del alemán Udo Bullmann. Valenciano fue la voz que defendió la abstención del PSOE ante el Comité Federal. Al regresar a la secretaría General del PSOE, Sánchez volvió a situar a Iratxe García al frente del PSOE en la Eurocámara pero no movió ficha en relación a Valenciano, cuyo actual puesto de vicepresidenta depende de todo el Grupo de los socialistas europeos.
La presidencia del Grupo Socialista sería para el PSOE un regreso a la influencia que tuvo durante tiempos pasados en la Eurocámara. Enrique Barón fue presidente del Parlamento Europeo (1989-1992) y presidente del grupo parlamentario (1999-2004) y Josep Borrell presidió también la Eurocámara entre 2004 y 2007.
El PSOE presentó precisamente la candidatura de Enrique Barón para presidir el Partido de los Socialistas Europeos en 2015 y fracasó. Un tercer europarlamentario del PSOE contactado por El HuffPost recuerda este episodio y advierte: "Antes de hacer cualquier otro movimiento habría que pensarlo muy bien".