El discurso de Oprah Winfrey en los Globos de Oro: "Tenemos un nuevo día en el horizonte"
La presentadora agradeció el premio Cecil B. DeMille acordándose de las víctimas de acoso sexual.
El discurso de Oprah Winfrey será uno de los más recordados de la 75ª edición de los Globos de Oro. En él, la presentadora aseguró a las mujeres y niñas de todo el mundo que "se acabó el tiempo" de los hombres con poder que las han silenciado, en referencia a la campaña Time's Up que han puesto en marcha muchas actrices contra el acoso sexual.
La estrella estadounidense, que además es productora, escritora y filántropa, fue este domingo la primera mujer negra en recibir el premio Cecil B. DeMille. Durante el agradecimiento, Winfrey rememoró cuando de pequeña vio a Sidney Poitier conviertiéndose en la primera persona negra en recoger un Oscar.
"Nunca había visto a un hombre negro ser celebrado de esa manera. En muchas ocasiones he tratado de explicar lo que un momento así significa para una niña pequeña, una niña que miraba desde asientos baratos mientras su mamá entraba por la puerta cansada de limpiar las casas de otras personas", recordó. "En 1982, Sidney recibió el Cecil B.DeMille aquí, en los Globos de Oro, y no se me escapa que en este momento hay algunas niñas pequeñas viendo cómo me convierto en la primera mujer negra a la que se le da este mismo premio".
La presentadora también habló sobre el poder de la prensa a la hora de destapar la corrupción y las injusticias y después cambió el foco al tema más importante de la noche: el acoso sexual.
"Lo que sé con certeza es que decir la verdad es la herramienta más poderosa que tenemos y me siento especialmente orgullosa de todas las mujeres que se han sentido lo suficientemente fuertes y capacitadas para hablar y compartir sus historias", dijo.
"Esta noche quiero expresar mi gratitud a todas las mujeres que han soportado años de abuso y agresión porque, como mi madre, tenían niños que alimentar y sueños que perseguir", continuó. "Son las mujeres cuyos nombres nunca conoceremos".
Winfrey recordó a Recy Taylor, una mujer negra de Alabama de 24 años que fue secuestrada cuando volvía caminando a casa de la iglesia y violada por seis hombres blancos en 1944. El caso de Taylor, que fue investigado por Rosa Parks, nunca fue a juicio. Taylor murió 10 días antes de los Globos de Oro a los 97 años.
"Ella vivió, como todos hemos vivido, demasiados años en una cultura quebrada por hombres brutalmente poderosos. Durante demasiado tiempo las mujeres no han sido escuchadas o creídas si se han atrevido a decir su verdad sobre el poder de esos hombres pero su tiempo se ha acabado", pronunció mientras el público aplaudía.
Winfrey se dirigió a esas niñas que podían estar viendo su discurso y les pidió su ayuda para un futuro más seguro sin acoso sexual. "¡Quiero que las chicas que están viendo esto sepan que tenemos un nuevo día en el horizonte!", exclamó. "Y cuando ese día finalmente amanezca será por la gran cantidad de mujeres magníficas, muchas de las cuales están en esa sala esta noche, y por algunos hombres fenomenales que luchan arduamente para asegurarse de ser los líderes que nos llevarán al momento en el que nadie tenga que decir 'Yo también' (Me too) otra vez".
Esta es la primera ocasión en la que Winfrey recibe un premio en los Globos de Oro, aunque previamente estuvo nominada por su papel en El color púrpura (1986) y como productora de El gran debate (2008).
Cada año, el premio Cecil B. DeMille reconoce a una persona por "contribuciones destacadas al mundo del entretenimiento". La larga carrera de Winfrey, su compromiso social y su influencia son algunos de los motivos por los que esta reina de los medios ha conseguido el galardón.
Este artículo fue originalmente publicado en la edición estadounidense del 'HuffPost' y ha sido adaptado del inglés.