Un manifestante, en llamas durante un enfrentamiento con los antidisturbios el 3 de mayo de 2017 en Caracas (Venezuela).Carlos Garcia Rawlins / Reuters
Las calles de Venezuela se llenaron de protestas mortales este domingo, cuando el Gobierno celebraba las polémicas elecciones para la Asamblea Nacional Constituyente, que tendrá poder para reescribir la Constitución del país.
Los manifestantes montaron barricadas y desafiaron la prohibición de concentraciones con alambres de espino y neumáticos quemados para bloquear las calles de Caracas. En un incidente captado en vídeo, se ve cómo una bomba de carretera explota cerca de un grupo de agentes en moto de la Guardia Nacional Bolivariana de Venezuela, dejando varios heridos.
Los opositores a las elecciones, que han sido consideradas ilegítimas por Estados Unidos y otros países de Sudamérica, ven los comicios como un intento del presidente Nicolás Maduro para consolidar su poder y apartar a la oposición política de su puesto. Según teme la oposición, además de reescribir la Constitución, la Asamblea podría funcionar como una especie de súperorganismo que remodele las instituciones políticas y disuelva la Asamblea Nacional, que a día de hoy es la única rama de poder que no está controlada por Maduro y sus afines.
Pese a las críticas internacionales, a la oposición pública y a la dudosa tasa de participación, Maduro se vanaglorió el domingo de haber logrado una amplia victoria y anunció que seguirá adelante con el establecimiento de la Asamblea Constituyente. Mientras tanto, la oposición sigue protestando en las calles y teme que la crisis siga en aumento.
La escalada de inestabilidad política en Venezuela se produce en mitad de una devastadora crisis económica que va de la mano de una escasez de productos básicos y de largas colas para comprar los alimentos disponibles.
Aunque el domingo fue uno de los días más sangrientos en la actual crisis política y económica, las protestas y confrontaciones violentas llevan sucediéndose desde hace meses. Miles de personas han sido heridas en las manifestaciones y al menos 113 han muerto asesinadas.
Los fotoperiodistas que se encuentran en el país han captado escenas de intensos tumultos, manifestantes heridos y un país polarizado que cada vez se ve más sumido en la agitación y la incertidumbre.
RONALDO SCHEMIDT via Getty Images Un manifestante, en llamas durante un enfrentamiento con los antidisturbios el 3 de mayo de 2017. Las protestas contra el presidente Nicolás Maduro llevan atormentando a Venezuela durante meses.
LUIS ROBAYO via Getty Images Un manifestante, frente a una bandera nacional durante una protesta de la oposición que bloqueó la carretera Francisco Fajardo el pasado 27 de mayo.
FEDERICO PARRA via Getty Images El personal médico traslada a un chico que sufre los efectos del gas lacrimógeno el 30 de mayo.
Andres Martinez Casares / Reuters Dos simpatizantes de la oposición, bajo los efectos del gas lacrimógeno, se abrazan frente a varios agentes de las fuerzas de seguridad del Gobierno el pasado 9 de julio.
JUAN BARRETO via Getty Images Un camión incendiado por los opositores bloquea una calle de Caracas el 18 de julio.
JUAN BARRETO via Getty Images Activistas de la oposición se enfrentan a los antidisturbios el 26 de abril.
FEDERICO PARRA via Getty Images Un simpatizante de la oposición, con casco y una máscara de gas, junto a una motocicleta el llamas el 31 de mayo.
FEDERICO PARRA via Getty Images Manifestantes en contra del Gobierno celebran un ataque a la sede de la Administración del Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela el 12 de junio.
FEDERICO PARRA via Getty Images Una activista de la oposición lanza una piedra a un agente antidisturbios el pasado 1 de mayo.
Carlos Garcia Rawlins / Reuters Un manifestante lanza una granada de gas lacrimógeno en un enfrentamiento con las fuerzas de seguridad el 20 de julio.
FEDERICO PARRA via Getty Images Un soldado de la Guardia Nacional dispara a los manifestantes de la oposición el 26 de julio.
FEDERICO PARRA via Getty Images Voluntarios médicos ayudan a un periodista herido durante los enfrentamientos entre los manifestantes y la Policía el 26 de julio.
JUAN BARRETO via Getty Images Un niño corre bajo la bandera venezolana durante una protesta el 27 de junio contra los ataques a periodistas.
Carlos Barria / Reuters Un manifestante evita un chorro de agua lanzado desde un vehículo de las fuerzas de seguridad el 26 de mayo.
JUAN BARRETO via Getty Images Un manifestante, disparado por un cañón de agua de la Policía antidisturbios el 10 de mayo.
Stringer . / Reuters Cruces de cartón con el nombre de los manifestantes muertos durante las protestas contra el Gobierno.
Ivan Alvarado / Reuters Un simpatizante de la oposición recibe la ayuda de los voluntarios de primeros auxilios el 22 de junio.
JUAN BARRETO via Getty Images Un manifestante huye del gas lacrimógeno el 20 de julio.
Carlos Garcia Rawlins / Reuters Las llamas inundan las calles durante las protestas contra las elecciones a la Asamblea Constituyente del pasado domingo 30 de julio.
Marco Bello / Reuters Los manifestantes se reúnen frente a una base de las Fuerzas Aéreas durante una marcha contra el Gobierno el 24 de junio.
Carlos Garcia Rawlins / Reuters Un manifestante corre para alejarse de las fuerzas de seguridad el 26 de julio.
RONALDO SCHEMIDT via Getty Images Un activista contra el Gobierno se prepara para lanzar un cóctel Molotov a los miembros de la Guardia Nacional durante una huelga general de 48 horas convocada por la oposición el 24 de julio.
Carlos Garcia Rawlins / Reuters Las fuerzas de seguridad cruzan una barricada el 26 de julio.
Ueslei Marcelino / Reuters Los simpatizantes de la oposición asisten a una concentración el 24 de julio para homenajear a las víctimas durante las protestas.
Christian Veron / Reuters Los manifestantes descansan junto a los nombres de las víctimas de los disturbios el 26 de junio.
Este artículo fue publicado originalmente en el 'HuffPost' EEUU y ha sido traducido del inglés por Marina Velasco Serrano
