Ocho cosas que todo el mundo debería saber sobre el sexo con la regla

Por suerte para muchas mujeres, tener la regla y mantener relaciones sexuales es sólo cuestión de cambiar las sábanas. Pero también hay quienes no se han atrevido todavía a dar el paso. Esas personas deberían tener en cuenta algo: están practicando la abstinencia cada mes (!).

Y lo que es más: si tu pareja es también mujer y vuestros ciclos no se han sincronizado (para vuestra información, eso es un mito), podéis llegar a pasar hasta el 50% de cada mes sin practicar sexo. Qué pérdida de tiempo...

Por tanto, la edición británica del HuffPost se ha puesto a investigar y ha recopilado las ocho cosas que todo el mundo debería saber si se está planteando sustituir el tampón por algo más.

Si hay gente que realmente se lo pregunta todavía, la respuesta es: sí. Sí, sin ninguna duda, puedes tener sexo con la regla.

Es cierto que siguen existiendo mitos sobre ello: en Polonia el tabú es tal que la gente mayor dice que si tienes la regla y te acuestas con alguien, puedes matarlo.

Aunque algunas mujeres prefieran esperar unos días porque se sienten incómodas ante el desastre que puede formarse, porque les duele o porque se oponen por motivos religiosos, no hay nada que te impida hacerlo si es lo que quieres.

No hay nada que no puedas hacer.

No hay muchos estudios sobre el tema, pero sí se han llevado a cabo algunos sondeos anecdóticos, como el de Medium, que descubrió que al 55% de los participantes el sexo con la regla les parecía "totalmente natural" e incluso "increíble". Así que, ¿a qué estás esperando para probarlo?

¿Qué? Estoy menstruando.

Una encuesta de ActionAid de 2016 desveló que una de cada tres mujeres británicas siguen avergonzándose por la regla y otro estudio de Bodyform reveló en exclusiva para el HuffPost Reino Unido que dos de cada cinco mujeres consideraban la menstruación como algo "sucio", "embarazoso", "incómodo" y "poco práctico en la vida diaria".

Por eso no sorprende tanto que algunas mujeres sigan negándose a darlo todo durante la regla, pero no hay ningún motivo por el que avergonzarse (sobre todo con tu pareja), ya que es una función natural del cuerpo.

No olvidemos que hay otros muchos fluidos corporales implícitos en el sexo. ¡Yuhu!

Mi caja de bebés me ha saboteado.

Muchas mujeres se sienten más incómodas esos días, se hinchan o tienen dolores abdominales. Según la doctora Helen Webberley, médico en la Oxford Online Pharmacy, es "totalmente normal experimentar hinchazón" con la regla.

"Como aumentan los niveles de estrógeno y progesterona, pueden provocar retención de líquidos. Cuanta menos grasa corporal tenga la mujer en el abdomen, más pronunciada parecerá la inflamación", cuenta al HuffPost Reino Unido.

Pero ha sido muy liberador para mí.

Quizá pienses que no merece la pena ni plantearlo porque a tu pareja le aterraría, pero el estudio de Medium anteriormente citado mostró que el 30% de los participantes (tanto hombres como mujeres) querría más sexo con la regla.

Por tanto, puede que a tu pareja no sólo no le importe, sino que además quiera probarlo (al fin y al cabo, tener seguridad en tu cuerpo y aceptarlo por completo es lo más sexy que alguien puede hacer). La próxima vez que te apetezca y te lo pienses, recuerda que es posible que a tu pareja le ponga mucho.

¡Conduce con cuidado! Y no olvidéis abrocharos el condón de seguridad.

El Servicio Nacional de Salud (NHS) británico advierte: "Es muy improbable, pero puedes quedarte embarazada si mantienes relaciones sexuales sin protección cuando tienes la regla si ovulas pronto. Esto se debe a que el esperma puede sobrevivir dentro del cuerpo de una mujer hasta siete días [después del coito]. Aunque el riesgo es pequeño, puede ocurrir".

Venga, que todo el mundo coja unos condones.

Según el NHS, "hay ciertos riesgos asociados al sexo durante la menstruación. El VIH y otras infecciones de transmisión sexual pueden pasarse con más facilidad durante el período de la mujer (de la mujer al hombre y viceversa)".

¿El que me visita cada mes? Puedes llamarlo la regla.

Así que prepara una toalla y unas sábanas que no sean blancas.

Este artículo fue publicado originalmente en el 'HuffPost' EEUU y ha sido traducido del inglés por Marina Velasco Serrano