Rusia convierte 'La Bella y la Bestia' en una película para mayores de 16 años
Siempre les quedará la versión de dibujos animados.
Rusia ha decidido que La Bella y la Bestia sea una película no apta para todos los públicos. La decisión se ha tomado después de que un legislador ultraconservador pidiese la prohibición por incluir un personaje gay en el reparto.
Un portavoz del Ministerio de Cultura ha informado de que que la cinta de Disney "se estrenará con una calificación para mayores de 16 años", según señala la agencia de noticias RIA Novosti.
El director Bill Condon reveló el miércoles 1 de marzo que la película incluye "el primer momento exclusivamente gay de la historia de Disney", aunque los críticos han señalado que no es para tanto.
Disney había calificado anteriormente la película como para mayores de seis años en Rusia, donde se estrenará el próximo jueves 16 de marzo. Esta semana Walt Disney Company Russia & CIS confirmaron el cambio de calificación en un comunicado enviado a AFP. Un portavoz dijo que la compañía no hará ninguna declaración.
El legislador Vitaly Milonov pidió el sábado al ministro de cultura Vladimir Medinsky que revisase la película porque se violaba la ley que prohibe la propaganda gay a menores. Milonov fue uno de los creadores de dicha ley, que el presidente Vladimir Putin firmó en 2013 y que recibió numerosas condenas internacionales.
Milonov aseguró este martes que estaba satisfecho con la restricción, y dijo que aspira a imponer "nuevos estándares europeos de tolerancia para que los niños piensen en eso como la norma".
En su carta al ministro de Cultura, Milonov calificó la cinta de Disney de "propaganda descarada y desvergonzada del pecado y las relaciones sexuales pervertidas". Asimismo, exigió que se prohibiera en los cines si se descubría que contenía "elementos de propaganda homosexual".
La ley prohíbe difundir información que pueda interesar a los menores sobre "relaciones sexuales no tradicionales". Y esto se ha usado como pretexto para prohibir eventos del Orgullo Gay.
De forma franca, Milonov ha atacado todo, desde Facebook hasta Eurovisión, y ha pedido la creación de una Policía de la moralidad para multar a la gente que viole "los valores tradicionales".
Rusia despenalizó la homosexualidad en 1993, pero hasta 1999 no eliminó su clasificación como enfermedad mental.