El Parlamento Europeo aprueba por amplia mayoría el tratado CETA con Canadá
El pleno del Parlamento Europeo (PE) ha aprobado este miércoles el tratado de libre comercio e inversiones entre la Unión Europea y Canadá (CETA).
El respaldo por la Eurocámara se ha producido con amplia mayoría de 408 votos a favor, 254 en contra y 33 abstenciones.
El Partido Popular Europeo (PPE), los conservadores y reformistas (ECR) y los liberales (ALDE) se han pronunciado a favor, mientras que los socialdemócratas se han dividido y los Verdes y la Izquierda Unitaria, así como las fuerzas euroescépticas, han votado mayoritariamente en contra.
El objetivo de CETA es eliminar barreras arancelarias con Canadá y facilitar el intercambio comercial y de inversiones de bienes y servicios.
El acuerdo pretende crear también oportunidades para la agricultura, si bien se han introducido algunas protecciones para indicaciones geográficas sensibles europeas.
El CETA, que empezó a negociarse en 2009, no podía aprobarse sin el visto bueno de la Eurocámara, aunque para su aprobación definitiva es necesario que sea ratificado por los parlamentos nacionales, una dificultad añadida en la que confían los grupos contrarios al acuerdo para dificultar su puesta en marcha definitiva.
LA COMISIÓN EUROPEA LO CELEBRA
El presidente de la Comisión Europea (CE), Jean-Claude Juncker, ha celebrado el respaldo de la Eurocámara al tratado. "Este acuerdo comercial ha sido objeto de un escrutinio parlamentario profundo que refleja el creciente interés de los ciudadanos por la política comercial", ha afirmado Juncker a través de un comunicado. Este acuerdo "progresista", ha dicho Juncker, "es una oportunidad para dar forma a la globalización juntos e influir en el establecimiento de las reglas comerciales globales".
Juncker ha hecho un llamamiento a los países para que "conduzcan un debate inclusivo a nivel nacional con los actores relevantes", y aseguró que a partir de ahora 'las compañías y ciudadanos europeos cosecharán los beneficios del acuerdo".
En un voto en el pleno en Estrasburgo (Francia), el Parlamento Europeo dio luz verde al acuerdo por amplia mayoría, con 408 votos a favor, 254 en contra y 33 abstenciones.