Siete localizaciones para recrear 'La La Land' sin salir de España
Se acerca la gala de los Oscar y este año hay una clara favorita: La ciudad de las estrellas: La La Land. La película, que ya ha puesto la piel de gallina a medio mundo, esconde bajo su manto de canciones pegadizas y de romanticismo un mensaje universal: la dificultad de tomar decisiones dentro de la pareja cuando éstas implican renuncias.
Pero tranquilos, este artículo no contiene spoilers. Sólo diremos que los personajes de La La Land viajan, se separan, se vuelven a juntar... y todos sus encuentros tienen lugar en un mismo sitio: Los Ángeles (Estados Unidos), la ciudad de las estrellas.
Con San Valentín a la vuelta de la esquina, más de uno habrá soñado seguramente con recrear el musical con su pareja, visitando algunas de las localizaciones más románticas de la película. La buena noticia es que para hacer nuestra propia versión no hace falta que irse tan lejos. Desde Ocean Club Marbella, expertos en crear experiencias románticas y exclusivas, han buscado las localizaciones nacionales más similares a las de la película para vivir un La La Land a la española.
EL APARTAMENTO DE MIA
Es posible que a más de uno le resulte familiar esta urbanización de 20 casas en la que vive Mia (Emma Stone). Su localización exacta es Long Beach, en California. Más de uno se sorprenderá cuando sepa que estas casas se construyeron en 1928 y tienen una fuerte influencia española. En aquella época muchos arquitectos americanos viajaron al sur de España en busca de ideas, lo que dio lugar a una proliferación de la arquitectura de inspiración andaluza en el sur de California.
El disfrute de este tipo de arquitectura está a nuestro alcance. Cualquier rincón de Andalucía posee un encanto especial, aunque si tenemos que elegir el más parecido a la película, podríamos hablar de los típicos patios cordobeses, llenos de color y por los que podríamos emular perfectamente el momento en que Mia y sus amigas salen camino del baile.
CLAQUÉ CON VISTAS
Un romántico baile bajo las estrellas, iluminados por la luna y los destellos de Hollywood. Así es la escena nocturna en la que los actores protagonizan su primer baile en pareja y su localización exacta es Cathy’s Corner, en el parque Griffith.
A lo largo de la costa española existen varios escenarios similares pero si hay uno que hace revivir especialmente el romanticismo de este momento de la película, ése es el del parque Tibidabo, en Barcelona. El mirador más alto de la ciudad condal es quizá uno de los lugares más románticos para visitar en pareja cuando llega la noche, ya sea para disfrutar de las vistas o para animarse con unos pasos de claqué.
EL LOCAL DE JAZZ
Escuchar jazz por primera vez puede convertirse en un tema serio y Sebastian (Ryan Gosling) lo tiene muy claro, por eso elige el Lighthouse Cafe para regalar a Mia su primera experiencia con este estilo musical. Este local de Los Ángeles lleva la autenticidad del jazz en su ADN. Ofrece música en directo desde 1949 y por su escenario han pasado figuras tan míticas como Miles Davis, Chet Baker o Cannonball Adderley.
Aunque parezca que uno sólo puede ser un entendido en este arte si su lugar de nacimiento es Nueva Orleans, en España también hay locales de jazz emblemáticos como el Café Central de Madrid o el Jimmy Glass Jazz Bar de Valencia. Por no hablar de grandes festivales como el Heineken Jazzaldia en San Sebastián o el Festival de Jazz de Vitoria-Gasteiz. Si Sebastian viniese a España, ¡probablemente no querría marcharse!
BAILE DE LAS ESTRELLAS
En honor a una de las escenas más recordadas de James Dean en Rebelde sin causa, la pareja protagonista termina una velada romántica en el observatorio del Parque Griffith. La escena es uno de los números musicales más importantes de la película. La pareja se sumerge tanto en el baile que, literalmente, se eleva hacia las estrellas.
El observatorio es uno de los lugares más emblemáticos de Los Ángeles. Desde él se puede disfrutar de las vistas panorámicas de la ciudad y el océano Pacífico. Se puede visitar y contiene varias exposiciones relacionadas con la ciencia, aunque (y aquí el truco) la escena de la película está grabada en un estudio, ya que no se permiten rodajes en el interior.
En España hay varios observatorios en los que quizá no flotes como los protagonistas de la película, pero sí podrás ver las estrellas más cerca que nunca. Tanto en el observatorio de Sierra Nevada (Granada) como en el del Teide (Tenerife) se pueden realizar visitas guiadas y quizá, con un poco de suerte, hasta arrancarse con un vals.
BESO EN LAS ALTURAS
El funicular de Angel’s Flight es otro de los lugares históricos de Los Ángeles. Tiene más de 110 años de historia y aunque aparece en la película en la actualidad ya no se puede utilizar.
En esta ocasión somos los españoles los que podemos dar envidia a los fans californianos de La La Land. Existen 10 funiculares repartidos por todo el país donde se puede recrear el beso de Mia y Sebastian. Uno de ellos es el de Fuente Dé (en Cantabria), que alcanza un desnivel de 750 metros y te transporta a las entrañas de los Picos de Europa.
PASEO POR LA CIUDAD
Los Ángeles no es solo glamour y exclusividad, también es una ciudad de contrastes. Si das un paseo por Downtown quizá te topes con el Gran Mercado Central, donde se ve a la pareja en uno de los momentos de la película. Se trata del mercado más grande y antiguo de la ciudad y, nada más entrar, el aroma recuerda la mezcla de culturas y sabores del mundo que se concentran en la ciudad.
Como en gastronomía no hay quien nos gane, en España se puede recrear este momento en miles de localizaciones diferentes. El Mercado Central de Valencia sería una opción perfecta, con casi 200 años de antigüedad y más de 300 puestos diferentes. Y más al sur, en Córdoba, encontramos el Mercado Victoria, que ofrece un espacio gourmet con una amplia variedad de sabores a escasos metros del impresionante casco histórico de la ciudad.
FIESTA EN LA PISCINA
No hay película ambientada en L.A. que se precie en la que no aparezca una escena de una pool party en algún chalet minimalista con una piscina infinita. Y por supuesto La La Land no podía ser menos. Mia y Sebastián tienen un divertido encuentro en una de estas localizaciones y nos regalan allí otra de las impresionantes coreografías (grabadas en una sola toma, por cierto).
Nuestro país está lleno de beach clubs, y dentro de Marbella, la ciudad de las estrellas española, encontramos el más grande y lujoso de todos: el Ocean Club. La música forma parte del decorado, así que sólo se necesita elegir una pareja de baile para arrancarse con la coreografía.