Los profesores exigen mayor reconocimiento: "Si no ganas un sueldo astronómico no se te valora"
Quim Sabrià ha sido elegido por la revista Forbes como uno de los menores de 30 años más influyentes del mundo. Todo gracias a EDpuzzle, un proyecto educativo que nació cuando era profesor en un instituto. Eso pese a que él es licenciado en Administración y Dirección de Empresas. Dice que, cuando decidió formarse como profesor e impartir clases en un instituto, varias personas le advirtieron de que estaba tirando su carrera profesional a la basura. Asegura que expresiones como esas, que también escuchó en su día David Calle, nominado a los ‘Nobel de Educación’, se deben a la mala imagen que la sociedad española tiene del profesorado.
Hartos de esa situación, un grupo de profesores lanzó hace unas semanas una campaña llamada #realinfluencers para poner en valor la influencia del maestro en la vida y futuro de las próximas generaciones. El proyecto, apoyado por la compañía tecnológica Blinklearning, busca también crear una plataforma en la que los influencers reales, los profesores, compartan experiencias y reclamen su posición y papel de vital importancia e influencia en la sociedad.
Ellos aseguran que campañas como estas son necesarias porque “la imagen que queda del profesorado es la de un colectivo desmotivado, acomodado, con excesivas vacaciones y poco compromiso”. “Y nada más lejos de la realidad. Sólo hay que darse un paseo por los diferentes centros educativos de este país y por los domicilios particulares de los maestros y profesores para ver la cantidad de ellos que están exprimiendo su vocación en interminables sesiones de trabajo dentro y fuera del aula”, subraya Moisés Llorente, profesor de Tecnología y maestro de primaria en el Colegio Madrigal de Fuenlabrada, que es también co-creador del Método PracTIC y cofundador de InnoBar.net.
"ES COMO DECIR QUE MESSI TRABAJA SÓLO 90 MINUTOS"
Quim Sabrià pone un ejemplo futbolístico. Dice que mucha gente piensa que ser profesor es algo como tener un trabajo a media jornada con vacaciones de tres meses al año. Y eso, insiste, es como decir que Messi trabaja sólo 90 minutos a la semana.
Los maestros aseguran que esa imagen negativa que perciben de ellos no existe en otros países. Pero sí en España, donde sólo un 8% de los profesores de secundaria dice sentirse valorado socialmente, según la OCDE. Por ejemplo, subraya Moisés Llorente, sociedades como la finlandesa tienen muy claro que el futuro de su país depende de lo que invierten en investigación, desarrollo e investigación. Y eso, añade, les lleva a valorar la importancia del trabajo docente en su justa medida.
“Cualquier médico, ingeniero, abogado, escritor, fontanero o cocinero ha necesitado en algún momento de sus profesores para poder llegar a desempeñar sus respectivas profesiones. Aquí en España pensamos más en el corto plazo y en la rentabilidad económica directa sin darnos cuenta de que una buena educación generará una mayor rentabilidad futura a todos los niveles”, lamenta Llorente.
"SE MIDE EL VALOR POR SU RENTABILIDAD"
El mismo profesor da otra clave: "En este país, si no ganas un sueldo astronómico no se valora tu trabajo y viceversa. Se mide el valor de una profesión exclusivamente por su rentabilidad económica y nunca por su rentabilidad social”.
Pero no es sólo eso, aseguran los docentes. Los padres y las madres, señalan, también podrían poner más de su parte. Jorge Largo, profesor y consultor en la Universidad Internacional Isabel I de Burgos, asegura que percibe “un ambiente un poco enrarecido en torno a la Educación” porque “hay poco acompañamiento”. Cree que, debido “al corre que te corre” del día a día, los padres no perciben la educación “con la sintonía con la que lo hacían antes”, lo que provoca que, cuando hay algún problema o “alguna disintonía”, “no apoyan a la institución, sino que la critican”.
Jorge Calvo, profesor de Secundaria y Bachillerato y Coordinador de Innovación del Colegio Europeo de Madrid, apunta en la misma dirección. Asegura que con “bastante frecuencia” se critican sus acciones “fuera y dentro del aula”. “Cuando un padre utiliza al alumno, a su hijo, como medio de comunicación entre él y el profesor… es cuando la figura del docente queda cuestionada. La figura del padre y del profesor debe ir siempre en la misma dirección”, destaca.
"LA EDUCACIÓN EMPIEZA EN CASA"
En esa línea, Calvo subraya que en España sí se tiene la idea de que la educación es importante, pero se piensa que es suficiente únicamente con llevar a los hijos a la escuela. Pero no es así. “La educación es un largo camino que empieza en casa, ¡no lo olvidemos!. El docente enseña, inculca, pero no puede educar sin el trabajo de la familia de sus alumnos”, insiste.
Moisés Llorente apunta también a los gobiernos como una de las causas de la mala consideración que, a su juicio, los profesores tienen en la sociedad. Explica que la Educación no es “una inversión que genere rentabilidad a corto el plazo” y tampoco sirve para ganar elecciones. “No es como el ladrillo o el turismo y por eso se deja de lado por parte de la administración”, lamenta mientras recuerda que sí genera mucha rentabilidad a medio y largo plazo. “Concienciar a la sociedad de esto cambiaría por completo el concepto que se tiene de la labor docente en la actualidad”, subraya.
En su opinión, no existe la creencia social de que cada decisión del profesor “puede condicionar de alguna manera el futuro de nuestros alumnos”. “Nuestra zona de influencia y, por tanto, nuestra responsabilidad, llega mucho más lejos que el ocio, la moda o la actualidad, espacio que sí cubren por ejemplo los llamados "youtubers”, sentencia.
Por ello, el profesor Jorge Largo exige que la apuesta y la confianza en la Educación debe ser inminente y absoluta por parte de todos: “Porque el 20% de nuestra población la constituyen los adolescentes. Es un dato muy flojo, pero son el 100% del futuro”.