Empieza a rascarte el bolsillo: los impuestos que vienen en 2017
El Gobierno está decidido a cumplir sí o sí con la tasa de déficit del 3,1% a la que se ha comprometido con la Unión Europea en 2017. Y, para ello, ha decidido aumentar la recaudación sobre los productos más impopulares y, por ende, con menor impacto sobre su intención de voto.
Así, en 2017 subirán, entre otros, los impuestos especiales al alcohol, bebidas azucaradas y tabaco. Tres ingredientes habituales en las noches de ocio en España, tres productos sometidos a las subidas de impuestos aprobadas por el Gobierno el 2 de diciembre. Con la medida, el Ejecutivo pretende recaudar 4.800 millones de euros en 2017.
Salir de fiesta va a ser más caro este año. ¿Cuánto? Si distribuidores y hosteleros repercuten las subidas en los clientes, la noche saldrá hasta un 7,5% más cara por copa (un 5% por el alcohol del combinado+un 2,5% de la bebida azucarada) y un 2,5% más si el que se la bebe, además, fuma tabaco industrial, un 6,5% si es de liar. Un canteo de noche porque, además de dinero, se pierde salud.
Fumando espero
Si cada uno de los alrededor de nueve millones de fumadores que viven en España, el 23% de la población según datos del Comité Nacional para la Prevención del Tabaquismo, consume una media de siete cigarrillos al día, 2.481 cigarrillos al año en cifras de la Encuesta Europea de Salud en España, y unas 124 cajetillas entre enero y diciembre, el coste anual de consumo de tabaco para un fumador medio superará los 290 euros en 2017. Los cigarrillos pasarán de 0,22 euros de media por unidad a 0,225 euros por pitillo en 2017, entre diez y doce céntimos más por cajetilla por el redondeo al alza que ya han empezado a aplicar algunas marcas.
Philip Morris y Japan Tobacco International repercutieron los nuevos impuestos nada más aprobar el Gobierno la subida. Así, las cajetillas más populares de Marlboro (Marlboro Red) suben de 4,85 a 4,95 euros. L&M Blue y Red en paquete blando de 20 cigarrillos pasan de 4,20 a 4,30 y en paquete duro, de 4,30 a 4,40. Las submarcas de Chesterfield también suben diez céntimos, y ahora costarán, según la variedad, entre 4,50 y 4,65 euros. Benson & Hedges Gold cuesta ya 5,05 euros, Coronas Black Soft está a 4,40 euros y Winston Xstyle Golg y Winston Xstyle Red se pagan a 4,50 euros.
Saca el güisky, Cheli
De acuerdo el estudio El gasto en tabaco, alcohol y juego en España en 2016 elaborado por EAE Business School, cada español consume de media 102 litros de alcohol al año. Cada español gastará una media de 887,42 euros en alcohol en 2017 por el incremento del 5% en el impuesto sobre bebidas alcohólicas.
El consumo de alcohol en España en 2016 fue de 709,49 euros por persona, un 20% más que en 2014 y un crecimiento acumulado del 17% desde 2010. Por comunidades autónomas, el estudio de EAE muestra que son baleares, gallegos, catalanes, asturianos y vascos los que más gastan en bebidas alcohólicas, con un consumo por persona de 93,27 euros (en 2017) , 86,21 euros, 84,45 euros, 80,34 euros y 79,42 euros al año respectivamente.
Una de esas, ¿y una sonrisa?
Existe el riesgo de que las empresas repartan la subida entre todos sus productos tengan o no azúcar. Así ellas no tendrían que afrontar el impuesto y su peso sobre el consumidor se reduciría. Los refrescos sin azúcar, los jugos y hasta el agua que también embotellan acabarían soportando parte del impuesto. Cuando la tasa Coca Cola comience a repercutirse, una lata comprada en un supermercado a una media de 0,57 euros en 2016 saldrá por 60 céntimos en 2017. Pero ¿sirve de algo que el Gobierno grave las bebidas azucaradas?, nos preguntamos.
Una casa en mitad de la calle
El Gobierno prorroga en 2017 el Impuesto sobre el patrimonio, que fijan las comunidades autónomas, para contribuir a la consolidación de sus finanzas públicas.
Muchos ayuntamientos vuelven a sacar el impuesto sobre bienes inmuebles (IBI). En total, 1.900 ayuntamientos subirán el valor catastral en 2017 y por ende este impuesto sobre la vivienda en propiedad.
OTRAS SUBIDAS PARA EL CINTURÓN
En el coche de papá...
Las tasas aeroportuarias están el aire hasta que el Gobierno decida si las congela o las baja un 2% como piden las aerolíneas y la CNMC. El transporte público queda congelado en 2017.
Ride the lightning
El Gobierno no subirá la parte regulada de la tarifa eléctrica, los denominados peajes que suponen alrededor de un tercio del recibo, en la próxima revisión para 2017. La pelota queda entonces en el tejado de las comercializadoras, que desde el 24 de diciembre se hacen cargo de financiar el nuevo bono social, con el que el Gobierno pretende que ningún hogar se quede sin luz. Los expertos temen que las compañías eléctricas lo repercutan en la factura.
Enciende bien la candela
El suministro de Gas Natural subirá un 3,5% en 2017 por el alza del precio de los carburantes, mientras que la bombona de butano, de la que se aprovechan ocho millones de personas en España, subió hasta los 12,28 euros en noviembre y su precio no volverá a revisarse el tercer martes de enero, cuando podría llegar hasta los 12,86 euros, según previsiones del Ministerio de Energía.
Dame más gasolina
Los carburantes han terminado el año en máximos anuales -1,215 euros para el litro de gasolina y 1,105 euros para el de gasóleo- tras unas semanas de fuertes repuntes que, previsiblemente, se prolongarán en el arranque de 2017 a raíz de la decisión de los miembros de la OPEP de disponerse a limitar la producción tras un largo período sin restricciones.
Pese a que en la subida de impuestos de fin de año se desestimaron los carburantes, los coches diésel están en el punto de mira de Hacienda por sus efectos contaminantes.
No sin mi Internet
La factura de telefonía e Internet subirá en 2017 por el aumento del precio de los paquetes convergentes (fijo, móvil, datos, Internet y televisión) a cambio de mejorar (sin que el cliente lo solicite) las prestaciones y los servicios. Movistar ya ha anunciado subidas de cinco euros en sus paquetes Fusión a partir de febrero.
También suben las llamadas desde móviles no sujetas a tarifa plana. Y sus rivales Vodafone y Orange pueden seguirles los pasos, informa Ramón Muñoz en El País.