La OCU denuncia que el 70 % de las aspiradoras tiene un diseño que impide su reparación
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha denunciado que el diseño del 70 % de las aspiradoras supone un "obstáculo insalvable" para su reparación y ha pedido además que se baje el precio de los repuestos para que los arreglos sean una opción frente a la compra de un nuevo electrodoméstico.
Tras estudiar cuarenta modelos de aspiradoras, la OCU ha pedido a los fabricantes que abaraten los "altos precios" de los repuestos respecto a los precios "relativamente bajos" de los aparatos con el fin de que sea una opción efectiva su arreglo.
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También ha concluido que el desgaste por el uso de las escobillas de carbón incluidas en el motor es el principal problema detectado en las pruebas de durabilidad que la OCU hace regularmente a los aspiradores.
Entre los modelos examinados se ha valorado su diseño para ser desmontado fácilmente o si incluye piezas estándar que se pueden arreglar con herramientas universales, la accesibilidad a la información relevante para el reparador o la disponibilidad de piezas de repuesto.
BOSCH Y SIEMENS
Según la OCU, modelos como los de Bosch o Siemens son los más fáciles de reparar y los que ofrecen más y mejor información sobre su diseño y la manera en la que se pueden sustituir las piezas. Además, ofrecen diez años de disponibilidad de repuestos a nivel Europeo.
Por el contrario, los de la marca Nilfisk son muy complicados de reparar al contener partes frágiles que se rompen durante el desmontaje, al igual que los de Dyson, ya que el usuario sólo puede reparar su aspirador averiado en su servicio técnico oficial.
En cuanto a la política de las marcas respecto a las piezas de repuesto, la mayoría de fabricantes ofrecen un periodo de cinco años (el mínimo que establece la ley), aunque algunas marcas como OK de Mediamarkt, Kunft de Worten o Selecline de Alcampo no han suministrado ninguna información sobre la disponibilidad de repuestos tras el periodo de garantía.
