Cómo maquillarse con gafas: trucos, claves y consejos para 'cuatro ojos'
Nadie dijo que fuera fácil. El maquillaje es todo un arte que hay que dominar con tiempo, paciencia, herramientas y cuantos más trucos, mejor. Pero si de repente llegan a tu vida (y a tus ojos) unas gafas, ¿qué hacer con ellas y con el eyeliner, la máscara de pestañas y toda esa parafernalia? ¿Cómo maquillarte —y, lo más difícil, gustarte— con gafas?
No hay una respuesta universal, porque todo depende de las gafas que se elijan. La clave está, por tanto y antes de todo, en elegir unas que sienten bien. Para eso se debe tener en cuenta que quede lo más centrada posible al ojo, "que no sobre mucha lente por los laterales", explica Beatriz Piriz, diseñadora de gafas para la firma mó, de la española Multiópticas.
"Siempre hay que buscar que haga contraste con el tono de piel: si tenemos la piel clara hay que irse a tonos tierra, rojos y oscuros; en pieles más oscuras, a pasteles, vivos y negros. El negro siempre queda bien", explica Piriz. Si queremos regalar unas gafas pero no sabemos si sentarán bien al homenajeado, un truco para acertar es que la montura sea de metal: "En ese caso podemos jugar más con las plaquetas para que se ajusten y queden bien".
Una vez escogido el modelo, hay que saber cómo maquillarnos, y ello depende sobre todo de la montura. Cuando utilizamos gafas de pasta, que tienden a encerrar el ojo y hacerlo más pequeñito, tenemos que destacarlo. Joana Rojas, maquilladora de The Make Up Art Studio, explicó a El Huffington Post en una masterclass para ligar con gafas organizado por mó de Multiópticas que en el caso de usar gafas de pasta hay que marcar el ojo, tanto con eyeliner como con máscara de pestañas. "Se puede dar un par de capas de máscara, ayuda a que la mirada tenga más fuerza. También se puede dar más color al ojo y difuminarlo bien. Y es importante tener las cejas bien arregladas, definidas y perfiladas, para que no se pierda la mirada", explica Rojas. Si esa gafa tiene punta en la parte superior, con la llamada forma de ojo de gato, la maquilladora recomienda no marcar demasiado el pómulo para no endurecer los rasgos.
En cambio, si optamos por unas gafas en carey o pasta en tono habana los colores "no deben ser muy brillantes, para que hagan un contraste suave". Con monturas ligeras y metalizadas sí se puede optar por sombras de más colores: "Es una montura que no limita. Nos permite jugar con tonos e intensidades, subir incluso a una sombra naranja. Siempre hay que usar máscara de pestañas, rizarlas y marcarlas bien, ya que abre mucho el ojo. Sin ella parece que tenemos el ojo desnudo. Con usar un poco de máscara y un poco de brillo en los labios lo tenemos todo hecho".