Chenoa comparte en redes el post que explica por qué no todos somos Chenoa
La cantante Chenoa lleva varios días en el ojo del huracán. El reencuentro de Operación Triunfo, y sobre todo el concierto y la cobra (o supuesta cobra) que vivió con David Bisbal mientras interpretaban Escondidos la ha convertido en trending topic en nuestras vidas. ¿O alguien ha conseguido tomarse un café sin sacar a relucir el tema? Pues eso.
En general los comentarios sobre la cantante de origen argentino han sido positivos. Los dos protagonistas de este asunto de Estado se han mostrado abiertos a hablar al respecto (de hecho, Chenoa se hizo una amistosa foto a la novia de Bisbal, Rosanna Zanetti, la noche del concierto; mientras que el de Almería ha negado que hubiera tal cobra), pero ella ha sido la más reforzada y su figura se ha mitificado —siempre con un toque de humor— en las redes, con etiquetas como "Yo soy Chenoa", "Chenoista" o "Todos somos Chenoa".
Ahora un post del blog Imperfectas ha querido acabar con ese clamor chenoista. Titulado Por qué #NoTodosSomosChenoa, lo más curioso es que la propia Chenoa lo ha apoyado.
Según el post, no todos somos Chenoa porque no es fácil serlo, "porque no todos tendríamos los ovarios —o los cojones— de hacer lo que ella ha hecho". Como argumenta la autora (que asegura no ser fan del estilo musical de la cantante ni seguidora de su carrera), no es nada fácil "cantar una canción de amor con una pareja que en su día nos dejó por otra persona. Puede que le hayan pagado una pasta por hacerlo, pero es innegable que hay que tener un par de ovarios para enfrentarse a una situación así ante millones de personas, haya o no pasado página en la relación. Pero si algun@s nos cruzamos con un/a ex por la calle y cambiamos de acera…".
Como explican en el texto, "independientemente de si Bisbal le hizo o no una cobra […] ella fue consciente instantáneamente de que la situación iba a dar pie a muchos comentarios y supo reaccionar muy bien. No olvidemos que la estaban viendo millones de personas". "Quien quiera ver a una pobrecita rechazada, humillada, que no ha superado una relación en vez de ver a una profesional segura de sí misma, a una mujer honesta capaz de ponernos los pelillos de punta, es que es muy cort@ de miras".