La carrera exprés del PSOE hacia la abstención
Cinco días para completar el viraje hacia la abstención. Y otra jornada movida en el socialismo español. La gestora del PSOE ha puesto definitivamente fecha para el decisivo Comité Federal: el próximo domingo. Ese día, los cerca de 300 miembros del máximo órgano entre congresos votarán si mantienen el ‘no’ a Mariano Rajoy o permiten un Ejecutivo del Partido Popular.
La dirección interina del PSOE ha fijado la batalla final a las 9.30 horas del 23 de octubre. El orden del día tiene como principal punto el “debate y votación de la posición política del grupo parlamentario socialista en el Congreso ante el proceso de investidura”. Ferraz ha estirado los plazos hasta el máximo -el lunes 24 arrancará la última ronda de consultas del rey para intentar formar Ejecutivo-.
Esta convocatoria la ha hecho la gestora un día después de que la potentísima federación andaluza -la que tiene más militantes y la que aporta más diputados en el Congreso- defendiera abiertamente la abstención por primera vez en público a través de su secretario de Organización, Juan Cornejo.
Los partidarios de la abstención han decidido desplegar sus argumentos en estos últimos días ya sin caretas para preparar el Federal, todo en mitad de un clima de enfrentamiento dentro de las propias federaciones y agrupaciones.
FERNÁNDEZ Y EL "MAL MENOR"
Consciente de esta situación, el presidente de la gestora, Javier Fernández, ha reunido a todos los parlamentarios socialistas en las Cortes Generales. Durante el encuentro en el Senado, el asturiano no ha querido marcar una posición, pero ha dejado entrever su postura favorable a la abstención. A su juicio, el PSOE tiene que elegir el próximo domingo entre esto o ir a elecciones. Lo debe hacer, ha argumentado, en “el terreno del mal menor”. “Ninguna de las dos soluciones es buena”, ha admitido.
Fernández ha insistido ante sus compañeros en que abstenerse no significa apoyar al PP, partido sobre el que no ha tenido buenas palabras. Los argumentos que ha dado es que no hay alternativa posible de Gobierno y que el PSOE tiene que ir a un congreso de “reconstrucción” para renovar sus ideas, su proyecto y su liderazgo.
También ha querido hacer autocrítica y ha asumido el “mutismo” de muchos líderes durante estos meses. “Un silencio mineral”, ha sentenciado, a la vez que ha dejado esta idea: "Me siento muy responsable por no encarar el problema y debatirlo con lealtad y sentido crítico. Seguimos con el planteamiento del no es no y fue como si ese debate estuviera prohibido y ahora no podemos cerrarlo en falso".
LA MAYORÍA DE PARLAMENTARIOS, A FAVOR DE LA ABSTENCIÓN
Tras sus palabras se han apagado las cámaras y se ha dado paso a los parlamentarios sin la presión de los medios. El PSOE andaluz ha vuelto a sacar su artillería. Casi todos los que han tomado la palabra han abogado por la abstención y por no repetir elecciones. En este grupo: Eduardo Madina, Francisco Menacho, José Caballos, José Martínez Olmos, Gregorio Cámara, Ignacio Sánchez Amor, Marcelino Iglesias y Vicente Álvarez Areces, entre otros.
Si más de una decena de voces estaba a favor de no ir a elecciones, tres se han levantado contra ella: Odón Elorza, Marc Lamuà y Margarita Robles. Esta última, el gran fichaje de Pedro Sánchez para las pasadas elecciones, mantiene que votará en contra de Rajoy, aunque el partido diga lo contrario. El exsecretario general no ha acudido a este encuentro, aunque ya está en España tras pasar varios días reflexionando en Estados Unidos. Eso sí, ha mandado este mensaje a través de su cuenta en Twitter:
En el PSOE se libran varias batallas. Por un lado está la del Comité Federal. El círculo de los barones más poderosos cree que no tendrán problema para vencer en la votación -en la del anterior Comité Federal vencieron por 132 frente a 107-. El domingo quedará resuelta. El siguiente paso que se plantea es qué va a pasar en la votación de la investidura.
LA GESTORA CIERRA LA PUERTA A UNA CONSULTA
En la reunión que ha mantenido este mismo martes la gestora no se han barajado fórmulas sobre ello. “El Comité Federal decidirá la posición sobre la posible investidura de Rajoy. Lo que venga después ya se irá comentando", ha aseverado José Muñoz, el integrante valenciano en la dirección de Ferraz.
La gestora sí ha cerrado la puerta a que se consulte a la militancia el voto en la investidura, como han defendido de manera infructuosa Francesc Antich (Baleares) y Francisco Ocón (La Rioja).
En la gestora están muy atentos a los diputados y sus declaraciones. En el partido se manejan distintas opciones como que obligar a que todos tengan que abstenerse o buscar fórmulas más imaginativas como que se ausenten once diputados o se abstengan solo ellos para que a Rajoy le salga la cuenta. El PSOE andaluz ya avanzó ayer que quien no quisieran votar lo que diga el Federal debería dejar su acta. En el extremo opuesto, Miquel Iceta sigue defendiendo que los socialistas catalanes van a votar en contra de Rajoy diga lo que diga el Comité Federal. El líder del PSC ha viajado de manera discreta a Madrid para reunirse de manera "cordial" con Fernández esta tarde y le ha repetido su posición. En esta misma línea se sitúan Margarita Robles y la aragonesa Susana Sumelzo.
No obstante, algunos destacados ‘sanchistas’ siguen defendiendo el ‘no’ pero han avanzado que acatarán lo que apruebe el Comité Federal, tal ha sido el caso de César Luena y Adriana Lastra -dos miembros de la antigua Ejecutiva-. “Nunca rompería la disciplina de voto”, ha dicho la diputada asturiana. También han proseguido con su ‘no’ pero reconociendo que asumirán la votación las federaciones de Madrid y del País Vasco, según han comentado sus líderes Sara Hernández e Idoia Mendia, respectivamente.
Este martes también se ha lanzado a allanar el camino para la abstención el presidente de Aragón, Javier Lambán, que ha afirmado que no le da “urticaria” pronunciar esta palabra. La misma expresión utilizó este lunes el PSOE andaluz. Espera además que todos sus compañeros autonómicos defiendan esa postura en el Federal y que todo el mundo acate la resolución.
El PSOE continúa en su carrera exprés hacia la abstención.