El príncipe Enrique, arrepentido por tardar en hablar de la muerte de su madre, Diana
El príncipe Enrique, nieto de la reina Isabel II, ha admitido sentirse "muy arrepentido" por "no haber hablado" antes sobre cómo le afectó la muerte de su madre, Diana de Gales, cuando tenía 12 años. Así lo recogieron el lunes varios los medios británicos.
La conversación tuvo lugar este fin de semana, cuando el príncipe, de 31 años y quinto en la línea de sucesión al trono (tras su padre, el príncipe Carlos; su hermano, el príncipe Guillermo; y sus sobrinos los príncipes Jorge y Carlota), celebró una fiesta en su residencia del Palacio de Kensington. Junto a varios atletas británicos organizó una barbacoa y varios eventos deportivos. Todo ello en favor de la organización Heads Together, dedicada a personas con problemas mentales y que creó con su hermano y su cuñada, Guillermo y Catalina, duques de Cambridge.
"Me arrepiento mucho de no haber hablado de ello", contestó Enrique cuando Rio Ferdinand, exjugador de la selección de Inglaterra y del Manchester United, le preguntó sobre el impacto que la reciente muerte de su esposa puede llegar a tener sobre sus hijos. Rebecca Ellison, la esposa de Ferdinand, falleció en mayo de 2015 a los 34 años de un cáncer de mama. Ambos tuvieron tres niños: Lorenz, que tenía nueve años cuando su madre falleció; Tate, que tenía 6; y Tia, que apenas tenía 4.
Tal y como recoge la BBC, el hijo del príncipe Carlos y Diana de Gales matizó que mantuvo silencio durante "los primeros 28 años" de su vida, ya que hace apenas tres años empezó a hablar en público sobre su experiencia. "Está bien sufrir, siempre y cuando lo expreses. Eso no es ninguna debilidad. Una debilidad es tener un problema y no reconocerlo ni solucionarlo", manifestó. Diana falleció en un accidente de coche en París el 31 de agosto de 1997 junto a su amigo Dodi Al-Fayed. Enrique entonces no había cumplido los 13 años.
"Es fácil mirar a Rio Ferdinand y decir: 'Eres un futbolista de éxito y tienes todo el dinero del mundo, los mejores coches', pero su mujer murió. Por supuesto que va a sufrir, sin importar el trabajo que tenga", afirmó el príncipe Enrique. Así, contó a la BBC que cualquiera puede sufrir problemas de salud mental, independientemente de que seas un soldado, una estrella del deporte o un miembro de la familia real.
El exfutbolista inglés explicó que el nieto de Isabel II "ha pasado por diversas fases" que ahora pasaran también sus tres hijos. "Escuchar su testimonio es gratificante, útil y muy educativo", subrayó.
Precisamente con iniciativas como esta, en pos de la salud mental, Guillermo y Enrique tratan de continuar el legado de su madre, muy implicada en organizaciones que buscaban una solución a los menos favorecidos.