¿Qué hay de mis vacaciones?
No había niño de Bescansa en el escaño pero si había niños y adolescentes en los despachos esperando que sus padres acabarán de currar. El hijo de Alicia Sánchez Camacho y del exministro Manuel Pimentel paseaba con su padre, mientras la hija de Antonio Hernando hacía tiempo en la zona del PSOE para disfrutar de su papá. Solo dos ejemplos de una sesión de constitución de la XII Legislatura en la que abundante chiquillería ha sido lo único fresco. No quedaba nada de la expectación y la esperanza de renovación de hace seis meses. Adocenados ya hasta los nuevos, no había diferencia entre el besamanos de señorías que soportaban Rajoy y Sánchez con el de Iglesias y Rivera. Incluso las camisetas reivindicativas, rollo Diego Cañamero y Compromís, sonaban un déjà vu.
La preocupación capital en los corrillos era ¿y tú cuando te vas? No había manera de hablar con el secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, José Luis Ayllón, sobre si Rajoy volverá a dar la espantada, sin que cada minuto se acercara algún diputado o periodista a preguntar: ¿Nos vamos de vacaciones o no? ¿Va a haber sesión de investidura por fin en la primera semana de agosto?
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Diego Cañamero tres votar en el estrado
Con mucho cuerpo de verano, operación bikini mediante, el blanco ibicenco ha sido el color predominante. Pero nada de hippismos, el estilo imperante era el modelo comunión de Mª Dolores de Cospedal, compensado solo por el aire jogging de Bescansa. Entre los señores, también de blanco y en mangas de camisa, Xavi Domenech y Pablo Iglesias daban envidia a los trajeados que sudaban la gota gorda.
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Carolina Bescansa (Unidos Podemos) pasa por delante de la bancada del PP con María Dolores de Cospedal en segunda fila.
La vicepresidenta en funciones del Gobierno muchísimo más delgada reconocía que está dejando el azúcar, otros de sus colegas confesaban que como no se aclarara el panorama iban a perder sus billetes de avión. En las tribunas, sorprendentemente con huecos libres, cazar pokemons se erigía como diversión para paliar el aburrimiento de una votación de la presidencia de la Mesa en la que Ana Pastor estaba cantada, tanto que hasta el BOE ha publicado su cese como ministra.
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El traje y corbata de Antonio Hernando (PSOE) frente a las mangas de camisa de Pablo Iglesias (Unidos Podemos)
La posibilidad de formar gobierno sonaba como hilo musical. La misma letra de siempre. Qué si el PSOE es un irresponsable y está jugando con Ciudadanos a pasarse la pelota en versión PP. Qué si Rivera apoyará a Rajoy al final e Iglesias se supera cada día en cinismo, según el PSOE… En fin, un estribillo tan repetitivo como si lo hubiera escrito Georgie Dann para la canción del verano.
