Se buscan héroes...
Unos barrenderos junto a la valla de un colegio alegrando la mañana a unos niños al ritmo de Bob Esponja; una madre de familia numerosa que en verano acoge a niños saharauis; un prestigioso cirujano plástico, que ha creado una ONG para ayudar médicamente a gente del Tercer Mundo… Todos hemos oído hablar de esos héroes del siglo XXI, que no vuelan, ni se convierten en fuego, ni se vuelven de piedra.
Nuestros Héroes Modernos no son Superman, Wonderwoman o el Capitan América. Son personas como Marta Cabrera quien, a sus 50 años, se lió la manta a la cabeza y decidió emprender el negocio con el que siempre había soñado: una pastelería en un pueblo de Valladolid. O como Antonio Fidalgo que, al acabar su jornada laboral como encargado de mantenimiento en una empresa farmacéutica, colabora con el banco de alimentos de su ciudad. O como Juan Carlos Suárez y Valeria Jiménez, que encaran con una sonrisa cada jornada maratoniana y el ciudado de sus hijos.
Son gente anónima, aparentemente normal, que despierta la admiración de los que les rodean porque han renunciado a la comodidad por la felicidad, porque contagian optimismo allá donde van, porque están implicados en causas solidarias o, simplemente, porque nos ofrecen una visión única del mundo.
Y estos son sus súperpoderes...