Un hombre de 68 años regresa a la escuela en Nepal tras abandonarla de niño para trabajar (FOTOGALERÍA)
Esta es la maravillosa historia de Durga Kami, un señor de Nepal que, a sus 68 años, ha regresado a la escuela que debió abandonar porque era demasiado pobre y debía ayudar a su familia trabajando.
Según el relato que de su historia hace The Wider Image, de la agencia Reuters, este hombre aprendió a leer y a escribir pero, con 11 años, tuvo que dejar los cuadernos y ayudar en el campo. Ahora, padre de seis hijos, abuelo de ocho nietos y viudo, ha decidido volver a clase, porque le ayuda a "olvidar sus penas", como la soledad tras la muerte de su esposa.
Seis días a la semana, el señor Kami -al que sus compañeros en la escuela de secundaria llaman padre-, se echa a andar más de una hora, con su bastón, hasta llegar al colegio. Allí hay otros 200 alumnos que, al principio, lo recibieron con extrañeza pero, ahora, lo adoran.
Gracias a los docentes tiene el dinero básico para pagarse el uniforme, pero no tiene ayuda para comida, así que pasa el día con el gundruk que come a primera hora, una especie de espinacas fermentadas. Aprende como los demás, aunque sea mayor que el propio profesor y sus compañeros se lleguen al hombro, y en los recreos juega con los niños al voleibol, como uno más.
El suyo sí es un caso de auténtica superación.
