Les ha costado acceder a sus medicamentos y tienen un mensaje para los partidos políticos
Siglo XXI. España. Y uno de cada tres enfermos no tiene acceso a los medicamentos que necesitan. Elsa no es un caso único y no habla desde un país en vías de desarrollo. Dice estas palabras desde España, donde este martes la campaña coral de organizaciones No Es Sano ha lanzado la iniciativa #DaleVoz, para visibilizar casos como el suyo (que no son pocos).
Pacientes, médicos e investigadores se enfrentan cada día desde perspectivas diferentes a un mismo problema: un modelo de investigación y desarrollo de los medicamentos que no funciona. Con la iniciativa #DaleVoz pretenden denunciar los fallos de "un sistema que impide que una de cada tres personas tenga acceso a los medicamentos que necesita; que no invierte en investigar en enfermedades que afectan a la población de los países pobres porque no es rentable; que impone precios excesivamente altos a los nuevos fármacos y que vive gracias a unas estrictas normas de propiedad intelectual que restringen el acceso a la información para desarrollar nuevos medicamentos para enfermedades globales como el cáncer, el VIH o la hepatitis C", denuncia la campaña.
Un error administrativo obligó a Edie a pagar 750 euros al mes durante tres meses por su medicación para el VIH. "Soy más consciente que nadie del precio de los medicamentos que curan el sida", explica. Por eso pide a los partidos políticos que bajen el precio de los medicamentos.
A través de estos vídeos, pacientes, médicos e investigadores manifiestan las consecuencias que tiene la falta de acceso a los nuevos medicamentos que curan su enfermedad. Piden a los partidos políticos "medicación para todos". Salvador Casado, médico de familiar, recuerda que para financiar los altos precios de los medicamentos el Estado está obligado a “recortar en servicios y en recursos humanos” y eso tienen un efecto directoen la calidad de la atención que se le da a los pacientes.
Oriol Mitjá, investigador, pide que se destinen fondos para encontrar solución a “enfermedades que hoy todavía no la tienen, incluso aquellas que no son rentables y que afectan a los más pobres”.
Aprovechando la celebración de nuevas elecciones, reclaman a los partidos que incluyan en sus propuestas medidas concretas que reformen el actual modelo de I+D de medicamentos. Se suman así a las peticiones de No Es Sano, que reclama transparencia, para conocer los precios reales de transacción en la compra de medicamentos, las inversiones públicas que se destinan al desarrollo de fármacos, los datos clínicos y los resultados de investigación y costes de los productos farmacéuticos financiados con dinero público.
La campaña No Es Sano está promovida por organizaciones como Salud por Derecho, Medios del Mundo, Órganización Médica Colegial, y cuenta con el apoyo de ISGlobal y Oxfam Intermón.