¿Cómo es una auténtica máscara de Chewbacca?
Nunca un trozo de plástico se hizo tan famoso en tan poco tiempo. La culpa la ha tenido Candace Payne, una mujer estadounidense conocida como Chewbacca Mom o la mamá Chewbacca. El pasado 21 de mayo Payne se grabó en su propio coche, emitiendo un vídeo en directo en Facebook (la modalidad llamada Facebook Live) que tituló "Son los placeres sencillos de la vida…" y que se hizo tremendamente viral: la mujer se partía de risa en directo con su máscara de Chewbacca puesta, y no había espectador que pudiera dejar de mirarla (y de reírse con ella).
Esos cuatro minutos de vídeo han sido vistos por unos 155 millones de personas en todo el mundo, y su risa se ha vuelto contagiosa y viral. Y la máscara del personaje de La Guerra de las Galaxias también.
Ella misma lo decía en el primer comentario de su vídeo, con unos 90.000 Me Gusta: "Todo el mundo debería tener una máscara como esta y un espejo". Sus deseos se han convertido en órdenes: según un estudio del comparador de precios idealo, la demanda de la cabeza del peludo personaje se ha disparado en un 27.500% en los dos días después de la publicación del vídeo de Payne. No, no sobran ceros ni hay comas equivocadas: un 27.500%.
Evolución de la demanda de la marca. / IDEALO
En el gigante del comercio elecrónico Amazon ha ocurrido algo similar. Como explican fuentes de la compañía a El Huffington Post, sólo en la última semana de mayo, pocos días después del vídeo viral, las ventas de la máscara en se multiplicaron por 17.
Como cuentan en el blog del comparador, la máscara lleva en el catálogo desde enero, pero nunca había causado demasiadas expectativas… hasta que llegó el vídeo. Entonces, además de dispararse su demanda, también aumentó su precio: nada menos que en un 30%, pasando en su punto más bajo de 30,5 a 40 euros.
En El Huffington Post nos hemos hecho con una de las célebres máscaras, la hemos investigado y le hemos hecho una ficha para que aquellos que no sean tan fans de Star Warso que no quieran gastarse 40 euros sepan cómo es casi como si la tocaran.
Peso: 335 gramos
Medidas: 25 centímetros de alto, 17,5 de ancho, 11 de fondo
Forma: es una reproducción estupenda de la cara del personaje. No tiene pelo, sino que es de plástico, pero creíble y reconocible.
Por delante: El pelo varía entre tonos de marrón, mientras que la nariz y la frente son más oscuras. Los dientes, bien hechos, son blancos y la mandíbula se abre para emitir sonidos. El plástico es suave y agradable al tacto.
Por detrás: el corazón de la máscara esconde un plástico marrón oscuro menos delicado, además de una pieza de goma para apoyar la mandíbula. Además, tiene dos correas en forma de T invertida para no tener que sujetar la máscara con las manos.
La mandíbula: es la parte activa de la máscara. Se mueve al apoyar la propia mandíbula en la del disfraz, para así poder imitar el movimiento de la cara.
Mecánica: funciona con dos pilas tipo AAA, LR03, de las pequeñas, que vienen incluidas. Se cambian en una pestaña cuadrada en la frente de la máscara con ayuda de un destornillador.
Los sonidos: hay cuatro tipos de sonidos, muy similares, que se van alternando en orden.
Marca: La máscara es comercializada por Hasbro, una de las principales jugueteras del mundo, junto a Disney, que licencia todos los productos de Star Wars.
Precios: en Amazon la hemos encontrado al precio más bajo, 37,90. En El Corte Inglés está por 54 euros, igual que en Hipercor. En Media Markt, ToysRus, Disney Store, Carrefour y Alcampo no estaba a la venta online.
Embalaje: la máscara viene en una caja de cartón en la que puede ver y tocar la parte delantera.
En la caja…: además de la máscara, vienen tres folletos de instrucciones: uno sobre cómo ajustar las correas y cómo hacer que emita sonidos, otro sobre las pilas y un tercero sobre el peligro de estrangulación con una advertencia de que no es conveniente para menores de tres años.
Funcionamiento: sencillo: ponérsela y abrir la boca. Y todos a reír.