Hugh Herr, premio Princesa de Asturias de Investigación Científica y Técnica 2016
El ingeniero mecánico y biofísico estadounidense Hugh Herr ha sido galardonado este miércoles con el Premio Princesa de Asturias de Investigación Científica y Técnica 2016 por su contribución al desarrollo y diseño de extremidades biónicas y prótesis robóticas.
"Ojalá este reconocimiento arroje luz sobre la misión global para acabar con la discapacidad humana en el siglo veintiuno a través de los continuos avances en la biónica", ha declarado tras enterarse de la concesión del galardón.
Herr, nacido en Lancaster (Pensilvania, Estados Unidos) en 1964, es un experto escalador que perdió sus piernas a los 17 años en un accidente de montaña. Como ingeniero, está especializado en el desarrollo de prótesis controladas por microprocesadores que emulan la funcionalidad de rodillas, tobillos o pies, con las que también pudo volver a practicar su deporte favorito.
Licenciado en Física en 1990 por la Universidad de Millersville (Pensilvania), posteriormente hizo un master en Ingeniería Mecánica en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) y en 1998 obtuvo el doctorado en Biofísica en la Universidad de Harvard. En la actualidad dirige el Biomechatronic Group en el Media Lab del MIT, donde ha desarrollado las que han sido calificadas como "las prótesis más sofisticadas del mundo".
Como consecuencia de la amputación de sus dos piernas por congelación en la montaña, dirigió su esfuerzo y talento a tratar de mejorar la movilidad de las personas con discapacidad—incluso diseñó para él mismo unas prótesis especiales que le han permitido seguir practicando escalada—. Herr ha abierto nuevas líneas de investigación, dando lugar a una clase de biohíbridos que han acelerado la fusión del cuerpo y la máquina.
Sus logros han tenido un impacto significativo en personas con discapacidad física, a través de las prótesis de rodilla adaptables para amputados femorales o las ortoprótesis de tobillo y pie, para pie equino y patologías causadas por parálisis cerebral o esclerosis múltiple.
Además de haber empleado modelos de puente cruzado del músculo esquelético para el diseño y optimización de una nueva clase de mecanismos de propulsión humana que amplifican la resistencia para actividades anaeróbicas, ha construido
zapatos elásticos que aumentan la resistencia aeróbica al caminar y correr.
Titular o cotitular de más de setenta patentes, Herr ha impartido numerosos conferencias en congresos y foros internacionales, como en las charlas TED, donde ha llegado a afirmar que "la tecnología cubre la brecha entre la discapacidad y la capacidad, entre la limitación y el potencial". En otras ocasiones ha asegurado que "un ser humano no puede estar roto nunca" y que el objetivo del Biomechatronic Group que lidera es "aumentar el rendimiento humano más allá de lo que permite la naturaleza".
Herr sigue la estela de las bioquímicas Emmanuelle Charpentier y Jennifer Doudna, que lograron el galardón en 2015 por desarrollar una tecnología que permite la edición de genes y la manipulación de ácidos nucleicos con gran precisión.
Hasta 34 candidaturas, procedentes de Alemania, Canadá, China, Colombia, Egipto, Estados Unidos, Francia, Hungría, India, Israel, Japón, México, Portugal, Reino Unido, Suiza y España, han optado a este galardón en 2016.
El Premio está dotado con una escultura de Joan Miró —símbolo representativo del galardón—, la cantidad en metálico de 50.000 euros, un diploma y una insignia. El jurado ha estado integrado por Juan Luis Arsuaga Ferreras, Mara Dierssen Sotos, Pedro Miguel Echenique Landiríbar, Marián del Egido Rodríguez, Luis Fernández-Vega Sanz, Cristina Garmendia Mendizábal, Álvaro Giménez Cañete, Bernardo Hernández González, José Antonio Martínez Álvarez, Clara Menéndez Santos, Amador Menéndez Velázquez, Ginés Morata Pérez, Enrique Moreno González, César Nombela Cano, Teresa Rodrigo Anoro, Inés Rodríguez Hidalgo, Marta Sanz Solé, Manuel Toharia Cortés y, en calidad de secretario, Vicente Gotor Santamaría.