La policía identifica a dos suicidas de Bruselas y sigue buscando a un terrorista huido
Dos hermanos fichados por la Policía, pero no por terrorismo, han sido identificados como los suicidas de los atentados cometidos el martes en Bruselas, confirmó el fiscal general belga, Frederic van Leeuw. Otro atancante, identificado por los medios locales como Najim Laachraoui, huyó y está en busca y captura. Todavía hay un cuarto terrorista sin identificar al que los investigadores dan por muerto y que habría detonado su carga explosiva en el aeropuerto. Otra persona cuya identidad no ha sido desvelada ha sido detenida por los atentados, que provocaron 32 muertos y 270 heridos.
Los terroristas suicidas identificados son Ibrahim y Khalid El Bakraui, ambos originarios de la capital belga. Los dos estaban fichados por los servicios de policía por actos vandálicos, pero no por terrorismo, según la RTBF. La Fiscalía ha confirmado que Ibrahim se inmoló en el aeropuerto de Zaventem mientras que Khalid fue el terrorista suicida que se inmoló en la estación de metro de Maelbeek.
Khalid, de 27 años, había alquilado bajo una falsa identidad la vivienda de la calle du Dries en el barrio bruselense de Forest, donde el pasado 15 de marzo tuvo lugar un tiroteo en el que uno de los sospechosos murió y otros dos huyeron, entre ellos supuestamente Salah Abdeslam, implicado en los atentados de París y que fue detenido posteriormente.
El mayor, Ibrahim, de 30 años, participó en un tiroteo contra la Policía en 2010, mientras que al año siguiente Khalid fue condenado por robo, informa el periódico Dernière Heure. La fiscalía ha informado de que se ha hallado su testamento en un ordenador. "En el testamento declaró estar 'en la precipitación', 'no saber más qué hacer', 'estar buscado en todas partes', 'no estar más en seguridad' y que 'si se eternizan, corren el riesgo de terminar junto a él en una celda", en referencia a Salah Abdeslam, dijo el fiscal.
En los registros efectuados el martes en el distrito bruselense de Schaerbeek también se han encontrado 15 kilos de explosivos y material para fabricar bombas.
(Sigue leyendo después de la imagen...)
EL TERCER HOMBRE
Los dos hermanos se han inmolado dentro de una operación en la que también ha participado un tercer hombre al que las fuerzas de seguridad buscan de forma activa: sería, según los medios locales, Najim Laachraoui, de 25 años, aunque su identidad no ha sido confirmada oficialmente. El terrorista dejó en la terminal de salidas la "carga explosiva más importante" antes de abandonar el lugar, pero no estalló hasta horas más tarde, cuando ya se encontraban los artificieros en el lugar, según ha informado la Fiscalía federal.
"Dejó un gran bolso y se fue antes de las explosiones. Contenía la carga explosiva más importante. Poco después de que llegaran los servicios artificieros, ese bolso explotó debido a su gran inestabilidad, pero nadie resultó herido", ha explicado el Fiscal general.
Las autoridades buscan a Laachraoui desde el lunes, ya que según la Fiscalía su ADN fue hallado en viviendas utilizadas por los terroristas de París. Además, habría viajado a Hungría en septiembre de 2015 con uno de los autores de la masacre del 13-N, Salah Abdeslam, detenido la semana pasada en Bruselas.
Este hombre, al que se considera cerebro de los ataques, partió a Siria en febrero de 2013 y es buscado desde el pasado 4 de diciembre. En un control a principios de septiembre en la frontera húngaro-austríaca fue identificado con el nombre falso de Soufiane Kayal, momento en el que estuvo acompañado por el presunto cerebro del aparato logístico de los atentados de París, Salah Abdeslam, capturado el pasado viernes en Bruselas, y de Mohamed Belkaïd, un argelino de 35 años abatido por la policía en la redada de la comuna bruselense de Forest, el pasado 15 de marzo.
Había alquilado bajo su nombre una vivienda en la comuna belga de Auvelais, que sirvió para preparar los atentados de París. Los investigadores también le acusan de haber estado, junto con Belkaïd, en contacto telefónico con kamikazes la noche del 13-N.
Según los expertos, hay una "fuerte probabilidad" de que Belkaïd fuera el destinatario de un mensaje corto en el que se decía "hemos partido, comencemos", enviado el 13 de noviembre por la tarde a uno de los kamikazes de la sala de espectáculos Bataclan de París desde un teléfono localizado en Bélgica.
EL RESPONSABLE DE LA CONFECCIÓN DE LOS CINTURONES
Laachraui era, según los medios belgas, el responsable de la confección de los cinturones explosivos utilizados en los ataques de la capital francesa, un extremo que rehusó confirmar la fiscalía.
El ADN de Laachraui se encontró en al menos dos de los cinturones explosivos: uno utilizado en la sala de conciertos Bataclan y otro en el estadio de Francia, lo que quiere decir que esta persona los manipuló, y quizá incluso fabricó, según la cadena de televisión pública francófona RTBF.
La policía encontró además las huellas de Laachraui en la vivienda utilizada en el barrio bruselense de Schaerbeek, donde se cree que probablemente fueron confeccionados los explosivos utilizados por los terroristas en París.
El alcalde de Zaventem, Francis Vermeiren, ha asegurado que los tres terroristas llegaron al aeropuerto en un taxi y que portaban equipaje: "Pusieron las bombas en sus maletas". Según la versión del alcalde, que no ha sido confirmada por otras fuentes oficiales, el sospechoso que se dio a la fuga también llevaba un explosivo en su maleta, pero "entró en pánico" y no la hizo explotar.