Hollande corrige su reforma laboral por las protestas masivas
La ministra francesa de Trabajo, Myriam El Khomri, ha avanzado este jueves varias concesiones a los sindicatos en su reforma laboral, tras la primera jornada de movilización contra ese proyecto, que el miércoles sacó a la calle entre 224.000 y 500.000 personas, según las fuentes. Con todo, la reforma seguirá adelante.
"Hay que responder a un cierto número de críticas", admitió El Khomri en una entrevista a la emisora de radio France Info en la que desgranó, en particular, dos modificaciones en la proposición de ley que está preparando y que debe adoptarse en consejo de ministros el próximo día 24.
En primer lugar, dijo que se prevé imponer cotizaciones suplementarias a los contratos temporales para "reducir la precariedad" ya que las personas que trabajan con ese régimen tienen dificultades para alquilar una vivienda o conseguir un crédito.
Precisó que en 2013 ya se instauró un suplemento de cotización en favor del fondo de indemnización del desempleo para los contratos de duración más corta, pero eso "no tuvo el efecto esperado" porque se trataba de un incremento "modesto" y no cubría todos los contratos temporales. Ahora, lo que se pone "encima de la mesa" para que discutan sindicatos y patronal es generalizar unas cotizaciones más elevadas para todos los contratos temporales.
La segunda concesión a la que aludió la ministra es suprimir del primer montaje de su proyecto de ley una disposición que hubiera permitido prolongar el tiempo de trabajo de los aprendices. En la actualidad sus horarios se pueden prolongar hasta 40 horas semanales si se obtiene el visto bueno de los inspectores laborales.
LA REFORMA SIGUE ADELANTE
Más allá de estos cambios, El Khomri mostró su intención de seguir adelante con la reforma laboral, pese a que los sindicatos que organizaron las protestas de ayer exigían su retirada.
Lo justificó porque aunque el Gobierno del presidente socialista François Hollande ha hecho "mucho" desde que entró en funciones en 2012, y ahora el país está en "una dinámica más positiva", "no conseguimos tratar problemas de fondo en nuestra sociedad", sobre todo la falta de flexibilidad: "Creo que nuestro sistema está agotado".
"En nuestro país -argumentó- tenemos un mercado laboral que es rígido. Creamos menos empleo que los demás", y eso pese a que el pasado año se crearon 82.300 en los sectores abiertos a la competencia (un alza del 0,5 %), según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INSEE). "Esta reforma -concluyó- es necesaria. Tiene que ser equilibrada, pero es necesaria".
La ministra insistió en que va a continuar la concertación con los sindicatos y la patronal para incorporar modificaciones, y señaló que el próximo lunes se presentará una nueva redacción.
En una primera reacción a las concesiones del Ejecutivo, Sophie Binet, dirigente de la Confederación General del Trabajo (CGT, una de las centrales organizadoras de la movilización del miércoles) consideró que "es una buena noticia pero no responde" a lo que le exigen, que es que "el proyecto de ley se tiene que retirar".