La OCDE, pesimista sobre la economía mundial, pide medidas "urgentes"
El último informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) es muy pesimista sobre la economía mundial. Advierte de una ralentización mundial y pide medidas "urgentes" para evitarla. El organismo recomienda aparcar la austeridad presupuestaria y aumentar la inversión pública, para reactivar la demanda.
La OCDE está a favor de la implementación de reformas estructurales y un menor ritmo de consolidación fiscal donde sea posible, ante las limitaciones de la política monetaria, que resulta insuficiente para impulsar el crecimiento.
La institución internacional, que ha recortado tres décimas su previsión de crecimiento mundial para 2016 y 2017, hasta el 3% y el 3,3% respectivamente, subraya que "la receta varía en función de cada país", particularmente en el caso de las reformas estructurales. Pero en general advierte de que las políticas macroeconómicas globales, incluyendo políticas monetarias, fiscales y estructurales, deberán prestar un mayor apoyo a la demanda y la reasignación de recursos.
"La experiencia sugiere que depender exclusivamente de la política monetaria ha resultado insuficiente para alcanzar un crecimiento satisfactorio, por lo que se necesita un mayor uso de palancas fiscales y estructurales", señala la organización.
EXPANSIÓN FISCAL E INVERSIÓN EN INFRAESTRUCTURAS
"Se necesita una respuesta colectiva más fuerte en política fiscal para apoyar el crecimiento y proporcionar un entorno favorable a las políticas estructurales de mejora de la productividad", señala la OCDE en referencia a los gobiernos que cuentan con la capacidad de endeudarse a tipos de interés muy bajos por un periodo largo de tiempo, lo que "incrementa su espacio fiscal".
"Muchos países cuentan con margen para una expansión fiscal que impulse la demanda", subraya la institución, que apuesta por un compromiso para elevar colectivamente la inversión pública, permitiendo mantener una senda sostenible en materia fiscal.
El gasto en inversión tiene un elevado multiplicador, señala la OCDE, que apunta que la inversión en infraestructuras de calidad contribuye a impulsar el crecimiento futuro y señala que los efectos positivos se verán reforzados si se adoptan también reformas estructurales que faciliten al sector privado aprovechase de estas inversiones.
De este modo, la OCDE defiende que la inversión pública colectiva en combinación con reformas estructurales permitiría un crecimiento más fuerte del PIB y, por lo tanto, a una reducción mayor de la ratio de deuda sobre PIB en el corto plazo.
TENDENCIAS DE LAS MAYORES ECONOMÍAS
La OCDE no desglosa el conjunto de perspectivas para sus 34 Estados miembros, sino que se limita a esbozar las tendencias en sus mayores economías. Estados Unidos crecerá en 2016 un 2 % (-0,5 puntos respecto de las anteriores perspectivas) mientras que lo hará un 2,2 % en 2017 (-0,2), y Japón se fortalecerá un 0,8 % en 2016 (-0,2) y un 0,6 % en 2017 (-0,1).
El Producto Interior Bruto del conjunto de la Unión Europea (UE) se incrementará en 2016 un 1,4 %, es decir, por debajo del 1,5 % registrado al cierre de 2015 y 0,4 puntos menos que en la estimación previa de la OCDE. En 2017, la eurozona verá crecer su PIB un 1,7 %, tres décimas menos de los proyectado anteriormente.
"La lenta recuperación en la zona euro es un factor importante que arrastra la economía global y vuelve a Europa vulnerable ante las sacudidas globales", dice la OCDE. Al mismo tiempo, aplaude las medidas no convencionales de compra de deuda del Banco Central Europeo (BCE) y critica -sin nombrarlos- que algunos países estén siendo demasiado lentos al aplicar reformas estructurales.
Las grandes economías emergentes también pierden algo de fuelle, especialmente Brasil, cuyo PIB ya se contrajo en 2015 un 3,8 %. En el presente año, la mayor economía latinoamericana caerá un 4 % según la OCDE, que le resta 2,8 puntos porcentuales de crecimiento estimado. En 2017 Brasil registrará un crecimiento plano, tras perder 1,8 puntos de crecimiento que le otorgaban las estimaciones previas de la OCDE.
China y la India se comportarán mejor, cree la organización, que no trastoca las proyecciones para el primero (6,5 % en 2016 y 6,2 % en 2017) y que cree que Nueva Delhi logrará en 2016 mejores datos de lo esperado (7,4 %, una décima más) y casi idénticos en 2017 (7,3 %, una décima menos).