Mauricio Macri jura su cargo como presidente de Argentina con Cristina Fernández ausente
El nuevo presidente de Argentina, Mauricio Macri, ha enviado este jueves un mensaje a América y al mundo durante su discurso de asunción, en el que ha afirmado que llega al país una "visión de la política" que buscará la "unidad y la cooperación de América Latina y del mundo", "sin prejuicios ni rencores".
El acto ha tenido lugar sin que la que ha sido durante 8 años presidenta de Argentina, Cristina Fernández, estuviera presente. Esta misma mañana se ha despedido en un emotivo acto a las puertas de la Casa Rosada, ante decenas de miles de militantes congregados en la Plaza de Mayo que han seguido su último discurso.
Por su parte, horas más tarde de las palabras de Fernández y tras unas horas de vacío de poder por un fallo judicial, Macri ha llevado a cabo su primera intervención como jefe de Estado: "Somos hijos de este tiempo y tratamos de comprenderlo sin prejuicios ni rencores. Creemos en la unidad y la cooperación de América Latina y del mundo en el fortalecimiento de la democracia como única posibilidad para superar las confrontaciones".
Macri durante su discurso de investidura
"Sostendremos todos nuestros reclamos soberanos sin que eso impida un normal mantenimiento de las relaciones con todos los países del mundo", ha continuado durante su discurso de investidura ante la Asamblea Legislativa, que se ha prolongado durante unos 25 minutos.
En el recinto se encuentran representantes de más de medio centenar de delegaciones internacionales que asisten a su investidura, entre ellas, ocho encabezadas por presidentes latinoamericanos. Antes de asumir la Presidencia, Macri ya había adelantado que el impulso a la política exterior sería uno de los ejes de su Gobierno.
EL ADIÓS DE FERNÁNDEZ
Por su parte, Cristina Fernández ha dicho adiós a ocho años como presidenta de Argentina y doce de kirchnerismo en el poder.
"Gracias por tanta felicidad, gracias por tanta alegría, por tanto amor... los quiero, los llevo en mi corazón y siempre voy a estar junto a ustedes", exclamó Fernández, con voz quebrada, sobre un escenario envuelto con la bandera argentina, de cara a una plaza colmada de agrupaciones kirchneristas que se han dado cita para despedirla.
De blanco impecable, con la Casa Rosada a sus espaldas, la mandataria saliente aseguró que "después de doce años y medio" del proyecto político iniciado con la llegada de su esposo y antecesor, Néstor Kirchner, al poder, puede "mirar a los ojos de todos los argentinos".