Iglesias, el pacificador del debate a tres con Sánchez y Rivera
Hasta tres veces pidió el líder de Podemos, Pablo Iglesias, a sus rivales en el debate a tres organizado por El País que mantuvieran la calma y bajasen el tono. Hasta que él mismo estalló.
"Creo que sería bueno que rebajáramos el tono", dijo la primera vez Iglesias, muy calmado, a Pedro Sánchez (PSOE) y Albert Rivera (Ciudadanos), cuando se enzarzaron por primera vez a costa del paro y las medidas que cada uno propone para solucionarlo.
La segunda vez, dijo: "Llamaría a que volvamos al buen tono. Parecernos a Inda y a Marhuenda no es bueno". Esta vez los candidatos se estaban peleando por la Educación. "Cómo has cambiado, Pablo", le respondió Rivera con ironía.
"Insisto en recomendaros el buen tono a los dos, porque parecéis el PP y el PSOE en los viejos tiempos", volvió a decir Iglesias en plan moderador.
Esa fue la tercera vez y la última. Después, cuando se superaron la hora y media de debate, los momentos de calor verbal fueron en aumento, y participaron los tres. Volaron los y tú más.
Iglesias no pudo continuar con su papel de moderador cuando Pedro Sánchez le reprochó que tuviese como número uno en la lista de Jaén a Andrés Bódalo, condenado por agredir a un edil socialista en 2012. Por alusiones, Iglesias pidió la palabra para explicar que Bódalo, sindicalista, lo que hacía era protestar, y no agredir, pero Pedro Sánchez, el que más ha interrumpido durante el debate, no le dejaba continuar. "Tranquilízate, no voy a entrar en el tema de la agresividad", dijo Iglesias aún tranquilo. "No me interrumpas, yo no te he interrumpido", "déjame continuar", "que no me interrumpas más", terminó diciendo, ya bastante molesto, el líder del Podemos. Como el socialista continuaba hablando, finalmente el moderador también se dirigió a él para pedirle que dejase terminar a Iglesias.