El toque redondo de una fiesta de Halloween es una calabaza que dé auténtico terror e ilumine de forma tenebrosa la velada. Quizá hayas visto esta fruta en muchas tiendas desde que empezó el otoño, y quizá pienses que está fuera de tu alcance poder tallarla. ¡Nada más lejos de la realidad!
Sigue estos pasos y podrás hacer tu propia calabaza tétrica con objetos que tienes en casa, para poner la guinda a una buena noche de brujas. La clave está en dibujar la cara sobre la calabaza y luego dar punzaditas a lo largo del dibujo antes de meter bien el cuchillo, para no tener que apretar. Recuerda meter la hoja un poco inclinada por la futura tapa, para que luego se sujete.
Deja un hueco para meter la vela por la boca (por arriba es más difícil y te puedes quemar) y apágala siempre antes de abandonar la habitación donde la pongas. Cuanta más carne de calabaza recortes del interior, más tendrás para cocinar y aprovechar bien la compra, aunque te llevará más tiempo. Pero no desistas: ¡hasta las pipas se pueden usar!
Si tienes suerte de tener jardín, tu calabaza durará más tiempo a la intemperie (aunque deberás vigilar a las golosas hormigas); si permanece en interior todo el tiempo, no la prepares con más de dos días de antelación a la fiesta o su interior se cubrirá de moho. Lo cual puede que quede muy bien para la ocasión, pero te morirás de asco al limpiarlo luego. ¡Feliz Halloween!