Forcadell, nueva presidenta del Parlament: "Viva la República catalana"
Empieza con polémica. La nueva presidenta del Parlament, Carme Forcadell (Junts pel Sí), ha dado por "cerrada la etapa autonómica" y ha propuesto a los catalanes dejar de ser "esclavos del pasado" para pasar a ser "creadores de futuro", en un discurso que ha concluido proclamando "Viva la República catalana".
En su primer discurso tras ser elegida presidenta de la cámara, la número dos de Junts pel Sí y expresidenta de la Asamblea Nacional Catalana ha señalado que se constituye en Cataluña un "Parlament soberano que quiere representar a un pueblo libre" y ha pedido a los diputados que estén "a la altura" en este "proceso constituyente" que ahora se abre.
"Estamos viviendo un momento trascendental en la historia de Cataluña", ha proclamado Forcadell, que ha definido esta nueva legislatura como "momento fundacional", con la formación de un "Parlamento nacional con plenas atribuciones" que debe "convertirse en el lugar donde la utopía se manifiesta".
"VIVA LA DEMOCRACIA"
"Viva la democracia, viva el pueblo soberano, viva la República catalana", ha exclamado al término de su intervención, en la que ha blandido una copia de las "constituciones catalanas", las normas promulgadas por el conde de Barcelona y aprobadas por las Cortes catalanas entre los siglos XII y XVIII: "Queremos recuperarlas", ha dicho Forcadell, que también ha evocado la figura de Lluís Companys, expresidente de la Generalitat republicana, fusilado hace 75 años por el régimen franquista.
Forcadell, que ha sido nombrada presidenta del Parlament con el apoyo ya previsto de Junts pel Sí y la CUP y el inesperado voto a favor de cinco de los diez diputados de Catalunya Sí que es Pot (ICV, EUiA y Podemos), ha imprimido también un marcado tono de reivindicación social a su discurso.
Además de reclamar que la presencia de mujeres en cargos de alta responsabilidad sea "una normalidad y no una excepcionalidad", ha subrayado que el Parlament debe ser "ejemplo de austeridad y transparencia", con diputados "leales a la ciudadanía y al bien común", que aprueben "leyes para los que más lo necesiten".
"SERVIR AL PUEBLO"
"Estamos aquí para servir al pueblo", ha afirmado Forcadell, que ha tendido la mano al conjunto de grupos parlamentarios para que la cámara sea "el Parlament de todos" y esté "al servicio de toda la ciudadanía, hablen lo que hablen, vengan de donde vengan".
Como gesto para simbolizar esta voluntad de respeto a la "diversidad y pluralidad" representada en el Parlament, ha avanzado que propondrá que en las reuniones de la Mesa de la cámara asistan, con voz pero sin voto, representantes de PP y la CUP, los únicos dos grupos que se han quedado sin presencia en este órgano.
Además de comprometerse a defender que todo el mundo se exprese "de manera ecuánime y justa" en el Parlament, ha apostado por mantener las "ventanas abiertas para escuchar la voluntad popular".