Tecnología 100% española: la camiseta inteligente que quiere chivarse de tus emociones
Mide en tiempo real la frecuencia cardiaca, la onda de la respiración y la temperatura corporal. No se trata de ninguna máquina de hospital llena de cables y electrodos, sino de una camiseta inteligente.
Su aspecto es como el de una de deportes y se puede llevar a modo de prenda interior. "Permite hacer vida normal e incluso dormir con ella", explica Santiago Jáñez, del centro tecnológico Eurecat, organismo que está detrás de este invento 100% español.
Por el momento es un prototipo que están presentando estos días en la feria IOT Solutions World Congress, en Barcelona. Por el momento es sólo un prototipo pensado para que pueda tener aplicaciones sanitarias. Con ella, "en cualquier ambulatorio se podría hacer una monitorización a distancia del paciente", apunta Jáñez.
La WBM-Wearable Biosignal Monitor, es su nombre oficial, está hecha con un tejido como el que se encuentra en muchas prendas normales, elastano con poliéster, pero la particularidad y principal innovación, según destaca este experto, es que cuenta con unos sensores textiles hechos con fibras conductoras. "Es un tejido de plata el que saca la señal del cuerpo", apunta.
No necesita cables para transmitir la información que recoge, que se pueden ver al instante en un ordenador o en un teléfono móvil y basta con quitarle la batería para poder meterla en la lavadora.
ROPA PARA MEDIR LAS EMOCIONES
Fuera del ámbito de la salud, para el futuro podría utilizarse en el ámbito de la seguridad y prevención, por ejemplo "para personas que trabajen en túneles", según explica este experto. ¿Se puede ir más allá? Sí, y la intención de sus creadores es que en el futuro pueda monitorizar experiencias para obtener información sobre las emociones.
Con el tiempo, quieren que los sensores sean capaces de registrar parámetros como la sudoración, el estrés, la conductividad de la piel y cruzarlos con las bioseñales que ya pueden medir (pulsaciones, temperatura y respiración) e incluso con información ambiental como la humedad.
El objetivo es "adaptar los sensores para que sean capaces de detectar esos estímulos y traducirlos a información medible", expone Jáñez. Así, la camiseta podría medir qué se siente al ponerse delante de un cuadro, al presenciar un concierto, ver una película o, según su aplicación más comercial, al ir de compras. Sería una especie de polígrafo "complementario a las encuestas de satisfacción", explica.
Al estar aún en la fase de laboratorio, "es complicado poner una fecha o un precio" de llegada al mercado, pero según aseguran desde Eurecat, la intención es que pueda comenzar a venderse en uno o dos años en colaboración con partners que quieran aprovechar esta tecnología para su negocio.