El Senado de Puerto Rico convierte el español en primer lengua oficial y relega el inglés
El Senado de Puerto Rico ha aprobado este jueves un proyecto de ley que declara el español como primera lengua oficial en la isla y relega el inglés a segundo idioma.
El Proyecto del Senado 1177, presentado en agosto de 2014 por Antonio Fas Alzamora, expresidente del gobernante Partido Popular Democrático (PPD), había caído en el olvido hasta que el pasado mes de junio se votó a viva voz y fue rechazado.
Sin embargo, se acordó su reconsideración y ha sido aprobado sin debate previo gracias al apoyo de la mayoría de los senadores del partido gobernante. En contra han votado los ocho senadores del principal partido de la oposición, así como el presidente del Senado, Eduardo Bhatia, y José Nadal Power (ambos del partido gobernante), y la independentista María de Lourdes Santiago.
Bhatia ha argumentado que no cree "en una legislación donde el Estado imponga un idioma oficial", ya que "limita a quienes quieran formar parte de un país". "En el siglo XXI, los esfuerzos gubernamentales deben ir dirigidos al pluriculturalismo, incluyendo la diversidad de idiomas", ha defendido.
Un argumento muy distinto ha esgrimido la legisladora independentista, que sostiene que el español ha de ser el único idioma oficial como vía para mantener la identidad cultural puertorriqueña.
LA "INVASIÓN DE EEUU"
"Desde la invasión de EEUU a nuestro país, se han puesto en vigor diferentes iniciativas dirigidas a la asimilación del pueblo puertorriqueño", critica Fas Alzamora en la exposición de motivos del proyecto. "Al establecer el español como primera lengua, fortaleceremos nuestra identidad cultural y validaremos la realidad de que más del 80% de los puertorriqueños no entienden ni hablan inglés", argumenta.
En su opinión, la legislación vigente ignora la "innegable realidad" de que una gran mayoría de los puertorriqueños no entiende ni habla el inglés y ha recordado que la "realidad" boricua "en términos culturales, históricos, geográficos y jurídicos, es muy diferente a la de nuestros conciudadanos estadounidenses".
Alzamora ha señalado que "un sinnúmero de hombres y mujeres ilustres y patriotas dieron la batalla porque no se nos arrebataran las características que nos identifican como nación caribeña y latinoamericana, única y diferente".
"Es imperativo que le demos a nuestra lengua vernácula el sitial que se merece. Tratar de equiparar otra lengua extranjera a la nuestra en asuntos oficiales de gobierno es un acto que demanda atención y rectificación", defiende.
HASTA AHORA, COOFICIALES
En 1993 se aprobó una ley que establecía que ambos idiomas eran cooficiales para los asuntos del Gobierno de este Estado Libre Asociado a EEUU. Sin embargo, el español es el más utilizado la excolonia española. El sector anexionista de la isla prima el inglés y el independentista apoya la primacía del español.
Aquella ley fue impulsada por el entonces gobernante Partido Nuevo Progresista (PNP), ahora en la oposición, que desea convertir Puerto Rico en el estado número 51 de EEUU. Sólo dos años antes, España había otorgado el Príncipe de Asturias de las Letras a Puerto Rico por su defensa del español, después de que lo oficializara como el único idioma.
El partido en el Gobierno aboga por mantener el actual estatus de Puerto Rico, que confiere la ciudadanía estadounidense a los puertorriqueños e impone las leyes federales y la política exterior, pero otorga gran autonomía para gestionar asuntos internos y concede soberanía en ámbitos como el deportivo.
La iniciativa aprobada propone legislar para establecer que el español sea el primer idioma oficial y de uso obligatorio en el ámbito ejecutivo, legislativo y judicial, y derogar así la ley de 1993 que equiparó ambos idiomas en los organismos públicos.