Muere el batería de Los Piratas de un disparo de la Guardia Civil tras agredir a su mujer y a un agente
Agentes de la Guardia Civil dispararon este miércoles en el abdomen a Javier Fernández, batería del grupo Los Piratas, tras agredir presuntamente a su mujer y a un miembro del Instituto Armado en una parroquia de Ponteareas (Pontevedra).
Los hechos ocurrieron este miércoles minutos antes de las 12:00. Una patrulla de la Guardia Civil recibió el aviso para desplazarse a la Parroquia de Gulanes, concretamente a la calle Costa Sequeiros, número 36, por un supuesto caso de violencia. Se les avisó a los agentes del Instituto Armado que el presunto agresor se encontraba muy nervioso.
Ante el tipo de aviso recibido, hasta el lugar se desplazó también una ambulancia del 061 con un médico. Al llegar a la zona, los propios vecinos indicaron a los agentes que se trataba de una caso de malos tratos y que la mujer presuntamente agredida había salido a la calle mientras que su pareja, Javier Fernández, seguía dentro del domicilio con el bebé de ambos.
ENTREGÓ EL BEBÉ A UN VECINO
Cuando la pareja de la Guardia Civil se aproximaba a la casa, se cruzaron con un vecino persona que llevaba al bebé de la pareja en brazos para entregárselo a la madre. Según declaró a los agentes esta persona, el bebé se lo había dado el propio agresor. Este vecino acompañó a los agentes hasta la casa donde se encontraba el batería de Los Piratas.
Al llegar al domicilio, se lo encontraron en ropa interior, descalzo y tan sólo acertaba a hablar incongruencias, según las mismas fuentes. Su estado era de nerviosismo y amenazó de muerte a los presentes. La patrulla de la Guardia Civil trató de convencerle para que se tranquilizase y fuera atendido por el personal médico allí presente.
En ese momento gritó muy alterado diciendo: "¡os voy a cortar en trocitos!". Acto seguido se metió al interior de la casa hasta donde le siguió uno de los agentes que pudo ver que de un cajón abierto de la cocina cogió varios cuchillos y tenedores con los que llegó a agredir al guardia civil en la cara con uno de los cubiertos. Eso obligó al miembro del Instituto Armado a retroceder hacia la puerta, pero el hombre le siguió para intentar agredirle de nuevo.
Fue entonces cuando el otro guardia civil de la patrulla al ver en peligro la vida de su compañero efectuó un disparo en el abdomen del agresor, según las mismas fuentes.
Fernández fue inmovilizado por los agentes y atendido por los servicios médicos, que lograron estabilizarlo. Posteriormente fue llevado al hospital de Meixoeiro de Vigo, donde finalmente falleció horas después.
"VÍCTIMA DE UN TRASTORNO BIPOLAR", SEGÚN SU MUJER
Según publica El Correo Gallego, la mujer de Javier ha escrito un comunicado a través de su cuenta de Facebook en el que afirma que "jamás fue un maltratador". Según cuenta, fue "víctima de un trastorno bipolar que estaba perfectamente controlado desde hace 10 años hasta que su psiquiatra tuvo la brillante idea de retirarle todo el tratamiento a pesar de que la familia le pedimos en dos ocasiones que no lo hiciese".
Según afirma, el nacimiento del bebé le había afectado e incluso acudió al psiquiatra para comentarle que se encontraba nervioso. "No agredió a ningún agente, hubo tensión pero no agresión", escribe. Puedes leer el texto íntegro aquí.