El laboratorio de la creatividad: el Fab Lab llega a Madrid
Un nuevo espacio situado en la zona de Oporto llega a IED Madrid para sumarse al del Palacio de Altamira y el de la calle de Larra. Se trata de un Fab Lab, un laboratorio que impulsa la creatividad proporcionando herramientas de fabricación digital. Aquí las posibilidades de creación son casi infinitas, algunas son más prácticas y otras más artísticas. El de IED Madrid, integrado en la red global oficial de este tipo de laboratorios, está lleno de posibilidades. Para mostarlo, aquí tienes una lista de ideas surgidas en varios de estos centros repartidos por el mundo.
PRÓTESIS DE BRAZOS CON UNA IMPRESORA 3D
Algunos usos surgidos en Fab Labs son tan brillantes como solidarios. El estudiante de diseño y arquitectura Evan Kuester creó dos prótesis de brazos con una impresora 3D para su compañera de estudios Ivania Castillo, quien nació sin mano izquierda. Si su idea se perfecciona, puede significar un gran avance para la medicina actual.
PARA ESCUCHAR MÚSICA
Este modelo boombox de Matt Keeter está hecho con paneles de madera a base de piezas octogonales hechas con cortador láser y reproduce MP3. Un proyecto Do it Yourself que se puede fabricar por menos de cien euros.
TAMBOR DE LENGUAS
Una de las normas básicas de uno de estos laboratorios que esté integrado en la red promovida por Fab Foundation y Massachusetts Institute of Technology (MIT), como a partir de ahora el de IED Madrid, pasa por que sus usuarios documenten los avances ocurridos en ellos. Por ejemplo, en la Fab9 Conference de Yokohama, se gestó un instrumento inédito: un tambor de lenguas (
(tongue drum). Su autor comparte las instrucciones para todo aquel que quiera crea el suyo propio.
TELÉFONO VOLADOR
Flone Flying Phone es una plataforma que permite a los smartphones volar. Inspirado en el movimiento Occupy, lo que busca es conquistar nuevos espacios públicos, en este caso aéreos. La estructura está creada reutilizando modelos antiguos en desuso.
AGRICULTURA CASERA
Fabponics está inspirado en el rápido abandono de la agricultura como activo económico en Puerto Rico. Este proyecto busca impulsar la agricultura casera para que pueda servir como apoyo en zonas con falta de alimentos en el futuro.