Barcelona suspende la concesión de licencias para alojamientos turísticos
Ada Colau, la alcaldesa de Barcelona, ya lo había avisado. "Estamos en peligro de tener una burbuja turística", había advertido antes de ser elegida. Este jueves, ha dado un primer paso para controlar la situación. El Ayuntamiento de Barcelona ha suspendido la concesión de licencias para alojamientos turísticos y ha abierto un proceso de participación para elaborar un nuevo plan regulador para este sector, que espera tener listo durante el primer trimestre de 2016.
Según ha informado el consistorio este jueves en un comunicado, la suspensión ya ha sido publicada en el Boletín Oficial de la Provincia de Barcelona (BOPB) y afecta a hoteles, apartahoteles, apartamentos turísticos, pensiones, hostales, viviendas de uso turístico, residencias de estudiantes y albergues juveniles.
"Ahora mismo se está favoreciendo los intereses de unos pocos como el sector hotelero, multinacionales que se están saltando las normas continuamente, mientras que hay unas normas muy duras para el resto de ciudadanos", denunció la ahora alcaldesa en marzo.
En una entrevista en Catalunya Ràdio recogida por Europa Press, ha subrayado que los conflictos que genera el turismo en Barcelona deben abordarse con una regulación global "para no tener que ir apagando fuegos", y ha lamentado que en los últimos años ha causado tensiones en barrios como Ciutat Vella, la Barceloneta y Sagrada Familia.
Ha asegurado que la nueva regulación servirá para que el modelo turístico de Barcelona pueda crecer de forma sostenible y no entre en crisis: "Gremios de hoteleros, vecinos y turistas saldrán ganando", ha incidido.
EVALUACIÓN DE IMPACTO SOBRE BARCELONA
Ya en el poder, el nuevo Ayuntamiento quiere hacer una radiografía del parque de alojamientos turísticos de la ciudad para evaluar la oferta existente y el impacto económico y social que tiene sobre el acceso a la vivienda y la ocupación del espacio público.
Colau ha dicho que convocará un pleno extraordinario para aprobar un consejo municipal de turismo, que ha definido como "una reivindicación histórica" de los ciudadanos de Barcelona.
Tendrá en cuenta la experiencia de otras ciudades turísticas europeas y abrirá "un proceso de reflexión y participación" con todos los actores implicados, para que el plan ayude a preservar la calidad de Barcelona con destino turístico y no suponga conflictos con los vecinos.
El consistorio asegura que quiere repartir los beneficios del turismo "equitativamente" entre los 73 barrios de Barcelona y descongestionar las zonas que están sometidas a más presión turística.