La verdadera historia del vídeo de este gran danés es más emotiva de lo que imaginas
El director de cine sudafricano Dave Meinert no estaba seguro del tiempo que le quedaba a Pegasus cuando se la llevó a casa.
Las perspectivas para esta perrita no eran buenas, tanto por su raza como por su procedencia específica. Los que Meinert describe como criadores irresponsables habían dado lugar a cachorritos propensos a sufrir problemas de salud como la sordera y la ceguera. "La mayoría de sus hermanos murieron", contó el director a The Huffington Post.
Meinert se grabó a sí mismo y a Pegasus en un time-lapse que muestra con una velocidad increíble el estirón que dio la perrita en cinco meses. Se trata de un vídeo precioso con mucha carga melancólica. Si no supieses cuál es el final de la historia, sería imposible que no se te escapase una lágrima. Pero, afortunadamente (y para tu tranquilidad), puedes dejar los pañuelos a un lado: Pegasus sigue viva.
The Pegasus Project, título del vídeo realizado por Meinert, nació con el objetivo de documentar su tiempo juntos y para ello hizo la misma foto a Pegasus casi todos los días durante cinco meses. Era una forma de "rememorar y celebrar todos sus días de salud", cuenta.
Meinert acogió a Pegasus hace un año y medio. En aquel momento, esta gran danés tenía diarreas y alergias en la piel, entre otras enfermedades. Y aun así, Meinert decidió comprarla. Era "una forma de asegurarme de que la iban a cuidar", explicó a Fast Company, uno de los muchos medios que publicó su vídeo. "Para mí, Pegasus ya había nacido y nada podía cambiarlo. Rescatándola, al menos sabría que nadie se iba a deshacer de ella".
Pero Pegasus no estaba sana del todo, a pesar de haber sobrevivido. Meinert temía que sus desordenados horarios de trabajo empeorasen los problemas digestivos de la perrita. Así que comentó en Facebook en la comunidad de rescate del Gran Danés que necesitaba que alguien se ocupara de Pegasus mientras él intentaba llegar a una situación más estable.
Monique Burrows, una profesora que participa de modo activo en el rescate de perros, se ofreció a cuidar de ella, primero como acogida temporal y poco después de forma permanente. En su casa llegó la segunda parte de esta historia, que es incluso más emotiva.
Pegasus encontró allí un amor mayor: su nueva mejor amiga, Luna. Se trata de otra gran danés y su dueña Monique Burrows, que las adora aunque es consciente de que el tiempo que pasen juntas puede ser breve y duro.
Pegasus y su mejor amiga, Luna. Foto: Monique Burrows
Habiendo acogido a muchos perros con enfermedades, a Burrows no le importó hacerse cargo de los problemas de Pegasus: "Desde el momento en que llegó, la perrita se sintió cómoda y feliz". La dueña estaba entusiasmada al ver que Pegasus y Luna enseguida se hicieron inseparables. "Es como si sus almas se hubiesen conocido en una vida anterior y ahora hubieran vuelto a verse", dice.
Aunque no todo es tan fácil.
Pegasus es una perra grande y encantadora con una gran personalidad, pero sigue teniendo problemas de salud. Burrows cuenta que está parcialmente ciega, y que su visión puede empeorar. También ha perdido parte del oído y los riñones le funcionan regular. Las piernas traseras le fallan cuando corre. El veterinario está examinando todo esto.
"Es una perrita muy dulce. Su nuevo truco consiste en intentar sentarse en mi regazo cuando estoy en el baño", cuenta Burrows.
A Pegasus no le importa despertarse con la cara llena de besos. Foto: Monique Burrows
Meinert echa de menos a Pegasus, pero cree que ha hecho lo correcto con ella. "Es duro cuando tienes que dejar de cuidar a un perrito. Pero al mismo tiempo, ella ha dejado de sufrir estrés", asegura. "Está contenta. Se las apaña bien".
Al director también le alegra que Pegasus haya encontrado un hogar estable en el que la cuidan. Gracias al vídeo, puede seguir recordando el tiempo que pasaron juntos."No sabía cuánto tiempo iba a durar. Y sigo sin saberlo", dice. "En vez de quedarme con lo negativo, decidí hacer un registro de sus días felices para celebrarlos, como conmemoración".
La propia Burrows tiene sentimientos encontrados con el vídeo. Por un lado, le gusta ver a Pegasus crecer, y espera que su popularidad conciencie a la gente sobre el rescate de gran daneses en Sudáfrica. Pero al mismo tiempo, también le preocupa que, pese a lo que parece un claro mensaje sobre los peligros de la cría irresponsable de perros, la gente pueda verse impulsada a comprar más daneses a personas que no quieren dar a estas razas la mejor vida posible.
Resulta trágico y cruel: ni siquiera los más sanos suelen vivir bastante. "Sólo quiero que viva el tiempo que le quede y haré lo que esté en mi mano para garantizar que recibe lo mejor de lo mejor con el fin de aumentar sus posibilidades", asegura Burrows. "Ojalá el amor pudiera salvarla. Entonces, viviría para siempre".
Burrows, acurrucada entre sus perras: Pegasus, Luna y Cloe
Este artículo fue publicado originalmente en la edición estadounidense de 'The Huffington Post' y ha sido traducido del inglés por Marina Velasco