Femen revienta un acto del Frente Nacional francés
Tres activistas de Femen han conseguido reventar el último acto del Frente Nacional, el partido ultraderechista francés que comanda Marie Le Pen.
Más allá de la batalla cainita entre ella y su padre, Jean Marie, el homenaje floral ante la estatua de Juana de Arco lo ha centrado, al final, la actuación de tres chicas -una de ellas negra, frente al racismo del que hace gala la formación- que se han expuesto ante los numerosos simpatizantes "frontistas", perturbando el acto en dos ocasiones.
Primero, cuando Marine Le Pen se acercó a depositar un ramo ante la estatua de Juana de Arco y dos activistas irrumpieron la escena filmada por las cámaras de televisión a pecho descubierto y con el eslogan: "Le Pen TOP fascist". Ya en la tribuna, una vez que su padre había abandonado la concentración, su discurso resultó perturbado de nuevo por otras tres militantes de la misma organización feminista, que también en topless y ante la prensa hicieron el saludo nazi desde un balcón cercano.
Le Pen tuvo que interrumpir su alegato durante varios minutos, hasta que los servicios del orden del partido desalojaron -con contundencia- a las activistas y desmontaron las banderolas con parafernalia nazi que habían desplegado en la balconada.
Finalmente, Le Pen pudo tomar la palabra y continuar con normalidad el mitin, en el que lanzó una diatriba contra la inmigración masiva, le islamismo, la Unión Europea (UE), su moneda única y los grandes partidos de Francia: el Partido Socialista de François Hollande y la Unión por un Movimiento Popular (UMP) de Nicolas Sarkozy.
"El agujero negro de la UE se lo traga todo" y "por todas partes vemos que Europa ordena y los gobiernos ejecutan", dijo la líder de la extrema derecha francesa en un discurso en el que se dirigió principalmente a las familias y a las clases populares.
Aparte de los actos convocados por el Frente Nacional, el 1 de mayo en Francia es también el escenario de las tradicionales marchas de los trabajadores, con un telón de fondo de divisiones entre los distintos sindicatos.
PELEA INTERNA
El ultraderechista Frente Nacional rinde homenaje a la patriótica figura francesa de Juana de Arco cada primero de mayo. Sin embargo, en la accidentada actuación de hoy, retiró de la celebración oficial al fundador y presidente de honor del partido, Jean-Marie Le Pen, por sus recientes declaraciones antisemitas. El partido que lidera su hija, Marine, obligó a Jean-Marie Le Pen, de 86 años, a dar un paso atrás después de que insistiera en describir las cámaras de gas de la Alemania nazi como un "detalle" de la Historia.
El decano líder ultraderechista no estaba invitado a desfilar junto a la actual presidenta de la formación ni a tomar la palabra en la tribuna instalada en la plaza de la ópera de París, como hacía cada año.
"Eso no interesa a nadie más que a los periodistas", dijo la líder del FN cuando la prensa le preguntó por la "ruptura" con su padre durante la marcha con los simpatizantes de extrema derecha. "Cada uno está en su sitio", se limitó a decir el carismático político.
Por su parte, el vicepresidente del FN, Florian Philippot, reconoció en declaraciones a "BFM TV" que existe un "desacuerdo profundo" entre las formas más moderadas de Marine Le Pen y las muy controvertidas opiniones de su padre, que este lunes rendirá cuentas ante el órgano disciplinario de su partido.