Ocho trucos infalibles para empezar a ahorrar
Cambiar costumbres, crear nuevos actos reflejos, engañar a la mente con sutileza… Son varios los puntos de partida de los trucos de ahorro que mejores resultados proporcionan:
- Abre una cuenta que uses solo para ingresar a principios de mes el 10% de tu salario.Los expertos aseguran que un 10% del salario no es significativo a la hora de perder calidad de vida. Si ese 10 % lo apartamos de nuestra cuenta en el momento en que nos ingresan la nómina viviremos igual. La diferencia: a lo largo de los meses veremos que la cuenta paralela va aumentando considerablemente. El truco está en esperar lo suficiente hasta tener una cantidad considerable (para cada uno habrá una diferente) y veamos los frutos del esfuerzo.
- Empieza a guardar en tu hucha todas las monedas de 2 euros que caigan en tu monedero.
0 Tu cartera irá reduciendo su tamaño pero con monedas de 2 euros tu hucha crecerá rápido y pronto podrás invertir en algún producto o servicio que te requería un esfuerzo extra. Inviértelo en algo que te aporte un extra (cómprate un televisor, vete de viaje, cambia la lavadora….) y evita gastarlo en un gasto cotidiano como la cesta de la compra o la factura de la luz. - Que en tu monedero los billetes sean de 20 euros o mayores. Aunque a finales de mes esto se haga más complicado, es importante cumplirlo el máximo número de días posible. La ventaja que nos proporciona es que inconscientemente nos da más reparo gastar billetes que monedas y cuando más grandes sean los billetes menos predisposición tenemos a cambiarlos. Evitaremos los gastos impulsivos.
- Cambia tus billetes gastados por billetes nuevos.
1 Evitamos así la tendencia a deshacernos de los billetes muy gastados, los rotos o incluso aquellos que hemos tenido que pegar con celo porque ya eran dos mitades. Los billetes nuevos duran más en nuestros bolsillos. - Aplica la teoría del cambio: por cada billete que gasto, guarda el 10%.Esta es una teoría prima hermana de la primera. El truco es ahorrar por cada compra que se realice y así los gastos se convertirán en ahorro.
- Paga tus compras en efectivo. Pagar en efectivo implica una mayor consciencia del gasto efectuado. Se valora más lo que se adquiere y se evitan compras impulsivas que hacemos por la falta de percepción de lo gastado. También evitamos pagos aplazados que implican el pago de intereses
- Cuando te aumenten el salario (si es que tienes trabajo y, más difícil aún, si es que te suben el sueldo), deposita todo el extra en tu cuenta de ahorro. Si has podido vivir hasta ahora con tu sueldo, ¿por qué no asegurarte unos ahorros cuando tu nómina aumenta? Retira ese extra cuando te ingresen la nómina, el dinero que “no vemos” es más fácil de ahorrar.
- Vete a hacer la compra después de comer y con una lista pensada.
2 Llenar la nevera es necesario y hacerlo a la hora acertada jugará a nuestro favor para disminuir el precio que paguemos. El supermercado está pensado para incentivar el consumo: la situación de los productos, las ofertas… Esas mismas técnicas podemos aplicarlas como consumidores, ir sin hambre y con una lista definida de lo que necesitamos evitará compras innecesarias que solo harán crecer nuestra cuenta.