'20 de abril' cumple 25 años: un homenaje a la canción en emojis
El 20 de abril de 1808, Fernando VII inicia su viaje a Bayona para entrevistarse con Napoleón. El 20 de abril de 1871, Estados Unidos declara una ley de derechos civiles que suprime al Ku Kux Clan. El 20 de abril de 1889 nace Adolf Hitler. El 20 de abril de 1912 muere Bram Stoker. ¿Y el 20 de abril del 90? Para muchos la respuesta es automática y tiene forma de saludo: "¡Hola, chata! ¿Cómo estás?".
Este lunes se cumplen 25 años de la fecha que el grupo Celtas Cortos mencionaba en su célebre canción 20 de abril. Escrita en forma de carta a un antiguo amor, se convirtió en uno de los éxitos más conocidos de la banda vallisoletana. Pero, ¿y si en vez de coger un papel y un bolígrafo su compositor, Jesús Cifuentes —solista del grupo—, hubiera cogido el móvil y hubiera mandado un WhatsApp? El resultado sería esta versión actualizada con emojis.
Aunque hable de 1990, la canción en realidad fue compuesta un año más tarde cuando Cifuentes pasó un año en un instituto en El Tiemblo (Ávila) como trabajador social. El tema formó parte del disco Cuéntame un cuento (1991), con el que Celtas Cortos fueron premiados con un Ondas ese mismo año.
Más artistas han versionado esta mítica canción, como Amaral, Siniestro Total o la banda Nomadi, que la cantó en italiano.
La fecha ha sido tan representativa para Celtas Cortos que, tras el regreso de Jesús Cifuentes al grupo —el cantante abandonó durante unos años la formación— su siguiente disco lo titularon 40 de abril. Además, centenares de vecinos de Valladolid llegaron a firmar una petición para que el Ayuntamiento modificara el nombre de la calle Primo de Rivera por el de 20 de abril del 90, algo que no se logró.
[BONUS TRACK]
Una de las frases de la canción ha supuesto agitadas discusiones acerca del nombre de la cabaña que menciona. Hay quien sostiene que la canción dice Turbo, pero en realidad habla de La cabaña del Turmo.
La cabaña en cuestión es un refugio de montaña situado a 1.730 metros de altitud en el Valle de Estós, en Benasque (Aragón), que suele utilizarse como base para ascensiones al Portillón de Oô y al Perdiguero.
Puedes ver fotos del aspecto que tiene la cabaña aquí y aquí.