Un testigo que vio el avión de la compañía Germanwings poco antes de que este se estrellara afirma que le sorprendió la poca altitud a la que volaba el aparato en una zona tan montañosa, aunque no percibió ningún otro elemento que delatara que el aparato se encontraba en problemas.
"Lo único que me extrañó es que a esa altura no iba a poder atravesar la montaña", indicó por teléfono Sébastien Giroux, que regenta una serrería en el municipio de Prads-Haute-Bléone.
Giroux apuntó que no vio humo ni escuchó ruidos extraños poco antes del choque del avión, que iba con 150 personas a bordo y cubría la ruta entre Barcelona (España) y Düsseldorf (Alemania).
NO VIO NI ESCUCHÓ EL MOMENTO DEL ACCIDENTE
El testigo dijo que no presenció el momento exacto del accidente, que tuvo lugar poco después de las 10.47 hora local (09.47 GMT), y precisó que tampoco escuchó el impacto, debido a que este tuvo lugar a una decena de kilómetros de donde él se encontraba.
La Gendarmería francesa pidió hoy a los vecinos de la zona a través de su cuenta oficial en la red social Twitter que no se acerquen al lugar, en un intento de que no se bloqueen las carreteras y se pueda facilitar el traslado de los equipos de rescate.
El ministro de Asuntos Exteriores español, José Manuel García Margallo, los Reyes de España, el presidente francés François Hollande, y el primer ministro francés, Manuel Valls, participan en el gabinete de crisis conjunto que los gobiern...
En el aparato viajaban 150 personas: 146 pasajeros, dos pilotos y cuatro azafatos. Según el Gobierno, 45 de ellos tenían apellidos españoles. El presidente francés, François Hollande, ha afirmado que "no se espera que haya supervivientes".