Sólo el líder de 'Los Romanones' será juzgado: el resto de delitos ha prescrito
Sólo el líder será investigado. El juez que investiga los supuestos abusos sexuales a menores por parte de 'los Romanones', un grupo de sacerdotes en Granada, ha acordado que la investigación judicial sólo continúe para el padre Román, considerado el cabecilla, mientras que ha declarado prescritos todos los delitos para el resto de once imputados (9 sacerdotes y dos seglares).
El juez aclara en su auto que la aplicación de la prescripción no se aplica a capricho o arbitrio judicial, sino que es "de obligado cumplimiento, si concurren plazos y requisitos legales", según ha informado este lunes el Tribunal Superior de Justicia andaluz (TSJA).
Este pronunciamiento del instructor Antonio Moreno coincide con las alegaciones efectuadas por la Fiscalía, que comunicó al juez que consideraba prescritos todos los delitos salvo el de abuso sexual con penetración y prevalimiento imputable únicamente al padre Román.
El 'clan' actuaría casi como una secta. Captaban a monaguillos a los que convencían luego de que el sexo entre ellos no era pecado. El grupo cuenta con diversas propiedades, amplias parcelas, incluso un dúplex en la playa. En esos lugares, los sospechosos hacían prácticas sexuales brutales y orgías sirviéndose de la situación de superioridad que ejercían sobre los jóvenes.
LA MEDIACIÓN DEL PAPA
La investigación se inició después de que el primero de los dos denunciantes, un joven que ahora tiene 24 años, pusiera los hechos en conocimiento de la Fiscalía el pasado mes de octubre, tras recibir en agosto la llamada del papa, que le pidió perdón en nombre de la Iglesia al leer el escrito que le envió relatando los hechos, ocurridos supuestamente cuando contaba entre 14 y 17 años.
Por los hechos fueron detenidos en noviembre tres sacerdotes y un laico, profesor de religión, que quedaron en libertad con cargos tras prestar declaración ante el juez. Solo el padre Román tuvo que abonar una fianza de 10.000 euros para no entrar en prisión preventiva.
Tras salir a la luz los casos, el arzobispo de Granada, Francisco Javier Martínez, se postró ante el alta mayor de la catedral de la ciudad para pedir perdón por los "escándalos", pero su archidiócesis se limitó a apartar de sus oficios únicamente a tres de los 10 sacerdotes implicados. Al papa Francisco no le ha agradado en absoluto la postura de la Iglesia española en este caso y hay incluso quien había apuntado que el santo padre podría apartar del puesto a Martínez.
Eldiario.es aseguró que fue la víctima quien tuvo que ponerse en contacto con el arzobispo de Granada, Francisco Javier Martínez, quien, de entrada, le criticó por haberse dirigido al papa directamente. Según esa misma información, tras prometer una investigación exhaustiva, dos jueces del Tribunal Eclesiástico de Valencia interrogaron tanto a Daniel como a sus padres y, a comienzos de octubre, el arzobispo informó a la víctima de que sólo daba crédito a las acusaciones contra tres sacerdotes.