Así se abre con éxito una franquicia
Más de 1.000 franquicias entre las que elegir. Es la cifra de los sueños de quienes deciden abrir hoy en España un negocio avalado por una marca, de los que ya existen 57.000 en marcha. Con una facturación superior a los 23.000 millones de euros en 2014, un 3,1% más en el 2013, según los datos de la Guía de Franquicias, este modelo se ha convertido en una salida a la falta de trabajo, además de una opción de autoempleo para quienes no contemplan estar a sueldo como fórmula laboral. El finiquito tras años en una gran empresa, las ganas de convertirse en el propio jefe y la necesidad de ganarse la vida, han impulsado la apertura de nuevas franquicias y gracias a ellas la creación de empleo de la que tanto presume el Ejecutivo como si fuese mérito propio.
El consultor Javier Cámara, no buscaba montar una franquicia pero se enamoró de una de ellas, el restaurante MásQMenos. “Llegué por casualidad. La familia Fernández Ochoa –famosos campeones de esquí- tenían una tienda de ropa de esquí en el paseo de Rosales, y como era un negocio muy estacional y el local era muy grande, estaban pensando en abrir un restaurante sencillo para obtener unos ingresos complementarios. Me pidieron que les asesorara y estuve haciendo estudios de mercado para ellos hasta que encontré una fórmula que se adaptaba a sus necesidades. Quedé con el director de MasQMenos y me enamoré del proyecto porque era una franquicia joven y bien diseñada”, explica Cámara, al que no le faltaba experiencia como directivo pues él mismo había ocupado el puesto de consejero delegado en una importante inmobiliaria y de director financiero de una compañía italiana de diseño, y sabía detectar una oportunidad nada más verla.
Al final, los Fernández Ochoa desistieron ante la dificultad para encontrar inversores, pero su asesor se quedó con la copla y decidió lanzarse en solitario a la aventura. “Lo esencial es la ubicación. Puedes tener un modelo de negocio fantástico pero si te falla la ubicación no habrá manera de que funcione. Hay que analizar el mix comercial de la zona y los hábitos de la gente. Me pasé muchas horas haciendo estudios de cola , entrevistas a la gente que pasaba por delante de los locales que me interesaban y preguntando a quienes entraban en sitios similares de los alrededores. Así te haces una idea de los motivos de compra y de los perfiles de tus futuros clientes. Me dibujé un mapa con los locales preferentes y me puse a negociar el alquiler. El barrio de Salamanca, Gran Vía, Canalejas y Plaza de España eran las opciones”.
MADRID, LA COMUNIDAD CON MÁS FRANQUICIAS
Madrid, la comunidad con más franquicias registradas, casi 350, y la restauración, el sector por el que se decantan más franquiciados, coinciden en este caso que abrió finalmente en agosto de 2013 en la calle Goya, 9, frente a la bulliciosa plaza de Colón y a un paso de Platea, un multiespacio gastronómico inaugurado el pasado mes de junio, que más que un competidor se ha convertido en un imán. Difícil elegir una situación más favorable.
“Yo soy un gestor, no un hostelero. Lo que más me atrajo fue que los dueños de la franquicia tienen un grupo de restauración en Cataluña importante -Cacheiro Restaurants-, y la segunda generación, con esa experiencia, ha ideado concepto en el que se reducen mucho los costes operativos porque los costes de cocina son mínimos ya que la carta está basada en cosas muy apetecibles, de buena calidad y elaboración sencilla, además de ser muy competitivos en precios”. El local permanece abierto 16 horas al día, de 8 de la mañana a 12 de la noche. Desayunos, aperitivos, comidas rápidas, meriendas y cenas informales. Se trata de conquistar a quienes pasan por delante.
Una vez por semana recibe la visita de un supervisor de la cadena, que realiza una auditoría sobre los estándares establecidos y analiza las desviaciones. Sobre la tentación de reproducir el modelo una vez conocido, Javier Cámara lo tiene claro: “La imagen de marca es esencial. El producto que se vende aquí, ibéricos, conservas, quesos… también tendría cabida en una taberna andaluza, pero la marca ha sabido combinar un producto de siempre con una imagen más glamurosa y actual, cuidando la decoración y la carta –bocadillos rústicos, cocas, ensaladas, sándwiches, raciones, conservas y tapas- para que la experiencia sea gratificante”.
La apuesta le ha salido tan redonda que acaba de inaugurar un espacio con el sello MasQMenos en el Corte Inglés de Princesa. Uno más de los 40 que tiene la franquicia repartidos por España , de los que dos están en Londres, y y este es el segundo para Javier. Con el nuevo local suma ya 18 empleos creados, de los que 235.670 que genera el sector, y que en el último año han crecido un 7,9% con relación al anterior.
“Los seis primeros meses yo estuve sirviendo las mesas, recogiendo y lo que hiciera falta porque la gente que trabaja contigo es importante que sienta que no está trabajando para ti sino contigo. Nunca he pedido a nadie cosas que no haya hecho yo previamente. Es evidente que la franquicia tiene vocación de autoempleo y la gente contratada tiene que percibir tu implicación en el negocio”. Un negocio que está en los costes, “que deben moverse entre el 15 y el 22% de la facturación. El margen bruto de MásQMenos está entre el 70 y el 75% cuando otras no llegan al 50%, una de las razones por las que la elegí, además de por ser fresca y no estar viciada”.
Un ejemplo práctico de cómo montar una franquicia con cabeza.