Vuelta al mundo en 5 platos invernales de menos de 10 euros
Una de las mejores cosas que tiene viajar es poder conocer otras culturas y, sobre todo, otras gastronomías. Pese a que se suele pensar que la buena comida está en los restaurantes de lujo, desde Planeta LowCost queremos demostrarte cómo se puede comer de lujo por muy poco dinero.
Locro Argentino. Vía Chris Ford (Flickr)
Sí, acabamos de pasar una época de mucha comida, pero se nos ha quedado el estómago abierto así que prepárate para un intenso viaje gastronómico invernal que comienza en América del Sur. En Argentina, Paraguay, Chile, Bolivia, Perú, Ecuador y Colombia el invierno se pasa mucho mejor con un buen plato de locro. Se trata de un guiso hecho con zapallo, porotos, maíz o papas. Dependiendo de la zona en la que te encuentres este plato se prepara de una forma u otra, pero lo que es indudable es que como mejor se come es de forma casera. Si tienes la posibilidad de ir a casa de algún conocido, es el momento perfecto para alimentarte bien y barato; si no es así, lo mejor es que estés donde estés, busques un restaurante familiar de comida casera para asegurararte buen precio y un buen guiso de locro.
Currywurst de Alemania. Vía Pinguino K (Flickr)
En Europa, la comida de invierno y la de verano suelen ser muy diferentes. Si vas a Alemania en estos meses es casi obligatorio pasear por alguno de los mercados navideños que decoran casi todos los pueblos y ciudades desde noviembre y tomar un vaso de vino caliente con una rica Currywurst (perrito con curry) o Bratwurst por unos 5,5 euros en total. Puede que escuchar vino y caliente en la misma frase no te guste demasiado, y si te decimos que encima lo bebes en taza, quizá te resulte más extraño aún. En realidad, el llamado Glühwein es un vino tinto acompañado por especias como cáscaras de naranja, canela en rama, vainilla en vainas y clavo. Lo más normal es pasear por los mercadillos locales con tu taza de vino caliente. Por cierto, la taza se paga como fianza, si quieres quedártela, son dos euros, si no, recuperarás el dinero al devolverla.
Jacket Potatoes. Vía Jonathan (Flickr)
No abandonamos Europa todavía. Además de los conocidos cocidos madrileños o las ricas lentejas, en otros países del viejo continente también hay platos invernales. Buena muestra de ello son las Jacket Potatoes inglesas. Para llevar mejor el duro invierno, son muy típicos en Reino Unidos las sopas y guisos, pero las Jacket Potatoes destacan especialmente por ser una receta muy simple pero deliciosa. Se trata de patatas asadas al horno y rellenas de productos muy variados, como carne, chili y queso, atún con maíz y mayonesa o judías con queso y bacon. La mejor forma de degustar este plato a un buen precio es ir a un pub a comer. Que no te suene raro, que allí es bastante habitual por ser más económico e igualmente rico.
Sopa de tomate turca, domates
Nos acercamos hasta Turquía donde la comida en los meses de frío también cambia bastante. Las bebidas calientes abundan en cualquier puesto callejero y suelen sentar muy bien para pasar el frío. Además, suele ser agua hervida, por lo que no hay peligro de bacterias. En cuanto a comida, el invierno suele llevarse mejor con una buena sopa de callos, muy típica en estos meses, pero hay más opciones que tampoco pasan desapercibidas: En esta época invernal es también muy común tomar Bulama çorbasi (sopa de trigo con yogurt y huevos), Tavuk (sopa de pollo), Oz çorbasi (caldo de carne con trigo y yogurt) y Domates (sopa de tomates). Para disfrutar de estos caldos y otros platos a muy buen precio, puedes ir a comer a Violina Cafe Restaurant, situado en el Gran Bazaar de Estambul. La cuenta no superará los 10 euros.
Sopa Wantan
Terminamos el recorrido en China. La medicina del continente asiático asegura que existe una estrecha relación entre comer alimentos nutritivos en la temporada de invierno y encontrar el equilibrio entre el yin y el yang. ¿Qué significa esto? Pues bien, en China se apuesta por comer comidas calientes y con más nutrientes para sobrellevar mejor el frío, más o menos como se hace en el resto del mundo, pero avalado por una hipótesis: la teoría energética de la comida china. Según este mandato, existen cinco categorías de alimentos: caliente, tibio, fresco, frío y neutral. Los platos calientes quedan bastante claros, con las sopas como primera opción y la más económica, pero no queda tan claro en el caso de otros alimentos. Tranquilo, sólo debes saber que alimentos fríos son el melón o la sandía, típicos de verano, por lo que en invierno estas frutas deberían desaparecer de la dieta. Otras como la pera o la manzana son neutrales, por lo que se pueden comer durante todo el año. Por lo que ya sabes, si vas a China, tendrás que mantener este equilibrio del yin y el yang en la alimentación.