Vive como un rico, tanto si te ha tocado el Gordo como si no te has llevado nada
El dinero no da la felicidad, eso está claro, pero no podemos negar que hay ciertos caprichos que solo se consiguen con él, ¿o no nos acordamos ya del vibrador de diamantes platino que David Beckham regaló a su señora? Al futbolista le costó más de dos millones de dólares y no debió de dolerle mucho a su muchimillonario bolsillo; tampoco nos olvidamos de la Barbie de diamantes y oro blanco valorada en 60.000 euros con la que Beyoncé y Jay Z agradaron a su hija cuando apenas tenía capacidad, siquiera, para hablar…
Pero el star system no es el único que puede permitirse estas extravagancias. Los ricos más comunes, para entendernos, también disfrutan de un nivel de vida inimaginable, lleno de caprichos y excesos. Para ellos, su tótem, por ejemplo, son los concierge, personas o empresas que hacen posible lo imposible y consiguen todo lo que necesitan y quieren.
Óscar Salmerón es, desde hace años, concierge en Attention to Details, empresa con más de 20 años en el sector del lujo trabajando con directivos, presidentes de grandes compañías, familias reales... "El lujo, como nosotros lo entendemos, no tiene que ver con las mejores marcas. La realidad del lujo está en el servicio, en servir literalmente a la gente. Ese es el gran lujo: las experiencias, las sensaciones. Puedes ir a un palacio o a un restaurante con tres estrellas que, si el servicio no es bueno, no vale", asegura. Por eso, "el secreto es dar al cliente lo que necesita y eso no tiene por qué ser siempre lo más caro", agrega.
Pues bien, si el Gordo de la Lotería ha llamado a tu puerta (afortunado seas), aquí tienes ocho servicios que te convertirán en un experto adinerado más; si no,
bienvenido al club podrás intentarlo también con sus versiones low cost. ¡Vive como un rico!