El supremo aplaza su decisión sobre la excarcelación de etarras y deja en libertad a Santi Potros
El Supremo ha aplazado su decisión sobre las excarcelaciones de etarras acordadas por la Audiencia Nacional, entre ellas la de Santi Potros, al no entrar a resolver el recurso del etarra Kepa Pikabea, que podía haber sido extensivo al resto de miembros de ETA, y pedir a las partes opinión sobre el asunto.
El pleno de la Sala de lo Penal del alto tribunal iba a tratar este martes la posible excarcelación de Pikabea en aplicación de una norma europea de 2008 sobre acumulación de condenas y si su decisión era extensiva a otros etarras, pero finalmente ha acordado volverse a reunir el 13 de enero para tratar este asunto tras escuchar antes a la Fiscalía y a su defensa.
Esto es porque Pikabea pidió que se le aplicara la decisión marco europea antes de que el Congreso la incluyera en la legislación nacional, cosa que hizo mediante una ley orgánica aprobada por el Congreso el pasado noviembre que limita los casos en que se acumulan condenas cumplidas en otros países de Europa (Francia en el caso de los etarras).
Tras cinco horas de reunión en sesiones de mañana y tarde, los quince magistrados del Supremo han acordado por unanimidad que las partes se pronuncien sobre la ley orgánica que traspone la norma europea, así como celebrar otro pleno el 13 de enero donde resolverán si procede revisar su tiempo de condena y si su caso se puede extender a otros etarras que han pedido lo mismo.
Santi Potros, considerado exresponsable del aparato militar de ETA, banda de la que luego se desvinculó, está ingresado en la prisión de Alicante II y fue condenado, entre otros, por el atentado de Hipercor de Barcelona de 1987, donde murieron 21 personas. Se le aplicó la doctrina Parot y se estableció su excarcelación en 2030, pero luego el tribunal de Estrasburgo anuló esta doctrina y su licenciamiento definitivo se fijó el 24 de septiembre de 2025. La sección primera ha establecido su fecha de excarcelación con efectos desde el 27 de enero de 2013.
PODRÍA AFECTAR A MÁS DE MEDIO CENTENAR
Las decisión que se adopte finalmente ha despertado mucho interés porque podría afectar a más de medio centenar de miembros de la banda terrorista que han cumplido parte de su condena en otros países de la Unión Europea y cuyos recursos todavía no han llegado al alto tribunal.
Entre ellos están los recientemente excarcelados por la Audiencia Nacional Santiago Arrospide Sarasola, Santi Potros, inductor del atentado de Hipercor, y del también miembro de ETA Alberto Plazaola Anduaga.
En los dos casos anteriores se acordó la acumulación de las penas de ambos terroristas un día antes de la entrada en vigor de la Ley 7/2014, y fueron excarcelados un día después.
De este modo, tanto Arrospide como Plazaola vieron descontadas de las penas a las que fueron condenados inicialmente los periodos de reclusión que cumplieron en cárceles francesas. Se da la circunstancia de que otras secciones de la misma Audiencia Nacional resolvieron en contra de excarcelar a otros presos en la misma situación.
La Audiencia Nacional acordó las citadas excarcelaciones a pesar de que la Fiscalía ya había anunciado su intención de recurrir ante el Tribunal Supremo el nuevo cómputo de penas en cumplimiento de una Disposición Adicional Unica de la ley, cuya aplicación hubiera evitado las salidas de prisión.
HISTORIAL DE PIKABEA
Por lo que refiere a Pikabea, se integró en ETA en 1980. Sólo en ese año ya participó en cinco atentados terroristas que se saldaron con la muerte de ocho guardias civiles y cinco policías nacionales. En mayo de 1982 pasa a formar parte de un nuevo comando con históricos como José Eciolaza, Dienteputo, Goicoechea Elorriaga Txapela, Olaizola Achucarro Antxon o Bilbao Beascoechea participando también en diversos atentados mortales.
En 1991 prosiguió su actividad criminal teniendo como compañeros a los miembros de ETA Insausti Múgica, Karpov y Olarra Guridi, con quienes participa en varios atentados que terminan con el asesinato de varios guardias civiles, policías y un particular.
No fue hasta julio de 1994 cuando Pikabea es arrestado en Francia, concretamente en la estación de tren de Bayona. En aquel momento, Pikabea ya era una persona destacada en ETA debido a que había sido lugarteniente del que fuera máximo dirigente de la banda, Francisco Múgica Garmendia, Pakito hasta su detención en 1992.