España, oficialmente libre de ébola

España, oficialmente libre de ébola

REUTERS

España está oficialmente libre de ébola desde este martes, casi cuatro meses después de que llegara a España el religioso toledano Miguel Pajares, primer enfermo de ébola en venir a Europa.

Desde que Teresa Romero, la auxiliar contagiada de ébola, superara la enfermedad el pasado octubre, han transcurrido 42 días sin nuevos casos. Aunque hace dos semanas el Ejecutivo repatrió desde Malí a una cooperante de Médicos Sin Fronteras (MSF), tras pincharse con una aguja mientras ponía una inyección a un enfermo de ébola, ésta no ha mostrado síntomas de haber contraído el virus.

"Los plazos corren en tanto en cuanto no haya en España nuevos pacientes diagnosticados con ébola. No es el caso de esta cooperante hasta que no se acredite", explicó la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría el pasado 21 de noviembre, el mismo día de la repatriación de la médico navarra, que sigue ingresada en el hospital Carlos III de Madrid y permanece aislada de manera preventiva.

LA PRESENCIA DEL VIRUS EN ESPAÑA

El primer enfermo de ébola que llegó a España fue Pajares, de 75 años, quien fue trasladado a España desde Monrovia (Liberia) el pasado siete agosto. El religioso fue tratado con suero experimental ZMapp, pero falleció cinco días después de ser repatriado.

Junto a él había viajado la monja española Juliana Bohi, quien recibió el alta hospitalaria el 28 de agosto tras haber sido sometida a diversas pruebas que descartaron que padeciera ébola.

El 21 de septiembre, el Ejecutivo español repatrió al leonés Manuel García Viejo, también religioso y director médico del Hospital San Juan de Dios en la ciudad de Lunsar (Sierra Leona). El misionero, de 69 años, llegó a Madrid en estado grave y con fiebre. Desde un primer momento fue tratado "con medidas de soporte vital para intentar mantener adelante sus órganos", según explicó el doctor Fernando de la Calle, del servicio de medicina interna del Carlos III, pero murió cuatro días después.

La última enferma de ébola ha sido la auxiliar Teresa Romero, contagiada en el Carlos III mientras atendía a García Viejo. Romero superó la infección el pasado 21 de octubre, tras realizarle dos pruebas negativas en sangre, con un margen de 48 horas entre ambas. La presencia del virus en algunos fluidos corporales propició que quedará en aislamiento una semana más, y recibió finalmente el alta el 5 de noviembre. De forma gradual, todas las personas que estuvieron en contacto con ella han ido quedando fuera de peligro a lo largo del mes de noviembre.

Médicos sin Fronteras (MSF) ha informado este martes de que la cooperante que está ingresada se encuentra "bien" y está "asintomática". En caso de que siga sin desarrollar síntomas, podría recibir el alta la próxima semana.

Comunicado de la OMS by El Huffington Post