Esperanza Aguirre reniega de Granados: "Siento profunda vergüenza"
Fue su mano derecha y ahora se la cortaría. La presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, ha renegado ante los medios de Francisco Granados, el que fuera su número 2, detenido por corrupción en el marco de la 'operación púnica'.
Granados ha sido arrestado por hacer supuestamente "favores políticos a cambio de dinero" en ayuntamientos, según han asegurado fuentes de la investigación a la agencia EFE. La operación se ha saldado con la detención de otras 50 personas, todas ellas acusadas de formar parte de una trama que cobraba comisiones por adjudicación de obras.
Aguirre ha dicho comparecer ante los ciudadanos con un "sentimiento de profunda vergüenza" por lo sucedido y ha asegurado que "nunca" sospechó que el ex secretario general del PP Madrid, "estuviera utilizando sus cargos para enriquecerse personalmente".
"Si hubiera tenido sospecha hubiera actuado con prontitud como he hecho siempre, como hice en el 'caso Gürtel', ha añadido.
La dirigente popular ha reconocido que no puede "eludir" su culpa ya que fue ella la que le propuso para acceder a cargos de responsabilidad y que "aunque hace años perdió la confianza en él" cometió un "error al haber depositado mi confianza en este señor".
"PERDÓN" SIN DIMISIÓN
"Quiero pedir perdón a los madrileños y a los militantes honrados del PP de Madrid por haber puesto como secretario general a este señor", ha añadido Aguirre que ha asegurado que no iba a "escudarse" en la "coletilla de la presunción de inocencia".
"Sé que los ciudadanos están hartos de estas coletillas, están hartos del espectáculo de corrupción que se encuentran cada mañana en los medios y yo también estoy harta", ha afirmado.
La presidenta de los 'populares' de Madrid ha reconocido que el PP tiene actualmente un problema con la corrupción política: "Cuando el PP alcanzó el triunfo en los 90, lo hizo porque se presentó como un partido absolutamente limpio, ese fue nuestro máximo tesoro y activo, desgraciadamente lo hemos dilapidado y hoy lo que tenemos que hacer es pedir perdón".
"Hay que decir que la corrupción no solo ha anidado entre nosotros", ha añadido en referencia a otros partidos, para continuar diciendo que la "ciudadanía necesita un partido limpio".
Pese a su "vergüenza", petición de "perdón" y su hartazgo, Aguirre descarta dimitir. Preguntada por si contempla esa posibilidad por los casos de corrupción en el partido, la presidenta del PP de Madrid lo tiene claro: "¿Presentar mi dimisión por el 'caso Gürtel'? No. Yo cesé a todos los responsables por el 'caso Gürtel' mucho antes de que fueran imputados. En absoluto".