Desalojo de las protestas en Hong Kong: la policía desmonta el campamento de los manifestantes (FOTOS)
La policía de Hong Kong ha empezado a desalojar el campamento de los manifestantes prodemocracia para descongestionar el tráfico en algunas zonas de la ciudad. Con grúas, han empezado a retirar las barricadas levantadas hace 16 días por los concentrados, pero les han autorizado a continuar sus protestas para pedir más libertad en el centro de la ciudad, una vez terminadas las tareas de retirada.
Unos 500 enmascarados han tratado de desalojar por la fuerza Admiralty, el corazón financiero de la ciudad. Se han producido choques con los manifestantes y la policía ha tratado de contener a ambas partes. Las imágenes difundidas por televisión muestran a los agentes ordenando a uno de los manifestantes pro Pekín que arrojase un cuchillo al suelo.
En el mismo área, donde los manifestantes concentran las protestas alrededor de los edificios gubernamentales desde el pasado 28 de septiembre, la policía ha despejado dos vías para que los empleados públicos puedan acceder a sus oficinas en sus propios vehículos.
El pasado lunes, los organizadores de las protestas y el Gobierno acordaron que los 3.000 empleados de la Administración pudieran volver a pie a sus oficinas, cuyos accesos habían sido bloqueados por miles de manifestantes que participaron en los primeros días de las revueltas a favor de más libertadas democráticas.
LOS MANIFESTANTES CONTINUARÁN SU LUCHA
Decenas de manifestantes prodemocracia continúan llegando a las zonas despejadas por la policía, a la espera de nuevos acontecimientos. Numerosas calles en el centro y algunas vías de los barrios de Mong Kok y Causeway Bay siguen ocupadas por decenas de manifestantes que han dormido allí.
"Creo que después de que la policía haya tratado de retirar por la fuerza algunas barricadas vendrán más manifestantes a acampar esta noche", asegura el líder estudiantil Joshua Wong, que cumple 18 años este lunes. "Cuanto más nos intente expulsar el Gobierno, más lucharemos".
La tarea policial tiene lugar un día después de que el presidente ejecutivo de la excolonia británica, CY Leung, dijera que el movimiento Occupy "está fuera de control", y agregara que había "casi cero posibilidades" de que las protestas fueran a cambiar la decisión del Gobierno de Pekín sobre la reforma electoral.
Leung ha afirmado que el movimiento democrático, al que rechazó calificar de revolucionario, "se les ha ido de las manos" a sus promotores y ha mostrado su confianza en que las protestas no durarán mucho más tiempo.